Capitulo 11

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La noticia del ataque a la secta Yunmeng Jiang corrió como pólvora. Tanto clanes pequeños como grandes lamentaban la muerte de Jiang FengMian y su esposa Yu Ziyuan, sin embargo mucho se ignoraba de lo que realmente había sucedido pues desde que los Wen ocuparon muelle de loto, nadie más pudo acercarse a ese territorio.

Como era de esperarse, el clan Lanling Jin acogió a Jiang YanLi en su casa y la rodeo de comodidades, sin embargo ésta no abandonaba  el templo principal donde rezaba por sus padres, y cada vez que oía que Jin ZiXuan regresaba de alguna reunión con las demás sectas y clanes, no dudaba en pedirle noticias, sobretodo si algo podía darle indicios de su familia.

Jin ZiXuan estaba asombrado con la fortaleza que Jiang YanLi, salvo por el día en que supo el final que había sufrido su clan, nunca más la vio llorar. Él suponía que encontraba consuelo en el templo, sin embargo el empeño que ponía en tener información y atender a los súbditos en lugar de derrumbarse, lo hizo admirarla. La constante convivencia y la determinación de Jiang YanLi disiparon cualquier duda que tenía respecto a su matrimonio.

Por su parte en la secta Qinghe Nie, los jades recibieron la noticia como un balde de agua fría, sobretodo Lan Wangji, quien ignorando por completo los consejos de su hermano, se escapó esa misma noche rumbo a muelle de loto.

Al llegar rápidamente confirmó que todo el lugar estaba lleno de guardias del clan Qishan Wen. Incluso en los pueblos más cercanos no dejaban de patrullar día y noche. Siguiendo el ejemplo de Wei WuXian, entró a una taverna para escuchar cualquier chisme que la gente podría estar corriendo.

- Ya vienen nuevamente los perros Wen ¿Cuándo se irán? La gente está tan asustada con su presencia que arruinan mi negocio.

- Se irán hasta que encuentren lo que están buscando.

- Así es, oí que el heredero del clan Yunmeng Jiang y su discipulo principal lograron escapar la noche en que atacaron.

- Si no hubieran escapado seguramente no hubiesen muerto sus padres.

- ¿Qué tonterías dices? Si solo eran ellos dos contra toda esa manada de perros hambrientos. Si se hubieran quedado habrían corrido la misma suerte que Jiang FengMian y la dama Yu Ziyuan. Espero que estén a salvo donde quiera que estén.

Al escuchar todo eso Lan Wangji regreso al clan Qinghe Nie con esperanzas mismas que unas semanas después desaparecieron cuando el mismo Jiang Cheng llegó completamente solo. Sin entrar en detalles, Jiang Cheng les contó que él y Wei WuXian tuvieron que separarse en el camino y desde entonces no había vuelto a saber de él.

Al día siguiente, ambos; Jiang Cheng y Lan Wangji emprendieron la búsqueda de Wei WuXian por los pueblos más cercanos sin tener éxito. Así los alcanzó un mes sin saber de él, mismo tiempo que los clanes y sectas tuvieron para organizar la rebelión contra el clan Quishan Wen. Por su parte, cuando Jiang YanLi recibió noticias de su hermano se apresuró a llegar donde él. Escoltada por Jin ZiXuan arribó a Quinghe Nie para recibir la terrible noticia de la desaparición de Wei WuXian.

- A-Jiang, debes encontrarlo. Debes encontrar a nuestro hermano - Suplicó,

Después de todo solo estaban ellos tres en el mundo. Sin poder evitarlo más, se permitió derrumbarse junto a su hermano y ambos rezaron por sus padres y por Wei WuXian. A pesar de la protección que el clan Lanling Jin le ofrecía, Jiang YanLi se negó a abandonar el sitio hasta que sus hermanos regresaran.

Dos meses después, respaldados con los súbditos de distintas sectas, Jiang Cheng y Lan Wangji comenzaron a atacar los distintos puntos donde se había establecido los Wen con la esperanza de encontrar algún indicio del paradero de Wei WuXian. Sin embargo la terrible verdad del destino que había sufrido éste en manos de los Wen cortó el corazón de ambos cultivadores.

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