Una existencia - Kanao

Recuerdos

Kanao suspira — Entonces... — Todo se vuelve negro para ella — E-Esto... —

— ¿Kanao? — Tanjiro toma su mano — Creo que ya estas en el límite... despierta —

Luego de eso, Kanao se levanta en su cama.

Tanjiro también lo hace — Aún no te acostumbras lo suficiente al plano espiritual, primero deberás... — Cae dormida.

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Al abrir sus ojos no se encuentra en la cama.

El sitio... era muy místico.

¿Un recuerdo? Parece que sí.

Mira su cuerpo, tenía una armadura al igual que en plano espiritual, aunque... su armadura emitía una extraña aura de color roja y un poco negra.

— ¡Kuri-san! — Una voz desconocida la llama — ¡Por fin te encuentro! — Una chica de pelo negro y ojos azules, una armadura igual a los demás pero con capa azul y retoques verdes llega a su lado.

Ella se encontraba como en un castillo, se podría decir que es solo la zona de entrenamiento de la Orden, pero frente a ella había una extensión gigante de tierras con pilares de luces blancas, podía ver algunos pájaros gigantes volando y... era de día.

En lugar de un sol habían tres, o más bien uno y dos halos de luces lo rodeaban.

— Por fin pude hacer que el estupido de Taira se fuese a entrenar — Se estira y suspira — He oído que próximamente habrá otro choque de mundos... — Suspira — El último fue hace milenios... —

— ¿Choque de mundos? — Kanao no entendía de que hablaba — Tan solo debemos pelear, no creo que ese mundo presente alguna amenaza para nosotros — ¿Eh? ¿Ella habló?

— ¿Sabes? Hay inscripciones antiguas que dicen que ese "choque de mundos" es realmente la revelación de un "Plano físico" o algo así — Ríe — Suena raro pero sería genial saber qué es exactamente —

— ¿Plano físico? ¿Qué, estamos en un plano espiritual entonces? — Sin poder evitarlo ríe — Somos fantaaaasmaaaas —

— Buuu — La chica junto a ella también ríe — Pero bueno, tal parece que Kamado-sama está empezando a entrenar a los jóvenes —

¿Kamado-sama? ¿Tanjiro? Según tenía entendido él era el líder de los Hunters...

— Él es muy lindo — Nuevamente no puede evitar hablar — Espero que me pongan con él —

— Si, si, tú y tu crush — La de ojos azules suspira — Es imposible, lo sabes bien —

— ¡Nada es imposible para el amor! — Junta sus pies y hace una pose como de rezar — ¡Oh diosa del amor, ayúdame! —

La chica de ojos azules ríe aún más fuerte — Sigue rezando, sigue, sigue —

Kanao empieza a mirar cada detalle de ese lugar.

— ¿Quieres ir a la sala de entrenamiento? — Mira a la de ojos azules y habla.

— ¿Kamado-sama irá? — Siente como su cabeza asiente — Vamos —

Da un paso, y todo se vuelve negro.

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— ¡Kanao! — Alguien la sacude violentamente, abre sus ojos asustados — ¿Q-Que te sucedió? —

Kanao tambalea un poco y toma aire.

Mira a su alrededor, estaba en la cama, Tanjiro tenía sus manos en sus hombros y la miraba de manera fija, los otros seguían durmiendo.

— Mírame — Él puso sus manos a cada lado de su cara y hace que ella lo mire — ¿Qué... sucedió? —

Se queda mirando sus ojos fijamente... ese brillo... esa preocupación... nuevamente todo se vuelve negro.

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— ¡Kuri! — Siente como alguien la abraza y empieza a correr — Amor te dejaré en lo que queda de la vanguardia, lanza sobre mí toda la magia que te queda — Sus ojos rojos se fijan en los suyos directamente — Te prometo que acabaré con él —

Detrás de su cabeza pudo ver como un pilar de luz blanca salía disparada al cielo, luego esa luz blanca empezaba a ser consumida por una neblina negra.

— Kuri — El Tanjiro de ese recuerdo tomó su cara entre sus manos y la miró directamente — Ya vengo —

— ¡No mueras! ¡No hasta saldar nuestra deuda! — Ella grita, solo para verlo correr hacia ese pilar de neblina negra.

El lugar donde se encontraba era como un callejón de piedra, habían dos edificios de piedra a cada lado, y podía ver como sangre se escurría por el suelo.

Da un paso al frente y puede ver a Tanjiro ser disparada nuevamente a su lado.

Ella empieza a hablar cosas raras.

— Kuri, mi nombre es mi poder, mi razón es mi fuerza y mi visión es mi dirección, dame... — Su cabeza empieza a doler — el poder de bendecir a aquel guerrero a quien fui destinada... — Su garganta arde, siente como algo en su estomago se empieza a quemar — y... ¡Le otorgo mi... vida! —

Una luz rosada emerge del cuerpo de la persona que estaba tirada en el suelo frente a ella.

Algo que podía ver era que no tenía una armadura, usaba una ropa bastante común.

Tanjiro sí usaba una armadura, pero esta ya estaba hecha pedazos ¿Cuanto llevaba peleando?

Mira al frente y por fin ve al enemigo.

Ojos negros que luego cambian a rojos, pelo rojo que llega hasta la cintura amarrada en una fila de caballo, se parecía a ella... bastante también a Tanjiro.

— Mi niño... — Escucha a Tanjiro susurrar — ...perdón — Luego sale disparado contra esa persona, decapitándolo.

Un pensamiento, una revelación, un sentimiento...

Aún no es la victoria total, el enemigo aún queda vivo lejos del frente.

Algo le dice eso.

Esa persona que Tanjiro acababa de decapitar... era su hijo, de él y de ella.

Por alguna razón lo sabe.

Tristeza.

Se siente triste, muy triste.