—&—


—Lo tenemos capturado, señor gobernante —Habló un droide, frente a Karian, quien estaba sentado sobre un sillón que podría ser fácilmente considerado como un trono. — ¿Dónde lo dejamos?

Karian alzó una ceja y miró seriamente a la celda frente a él, ahí dentro estaba Xiao Zhan. No se movía, estaba sentado en sus rodillas y tenía la cabeza gacha, su cabello le cubrían el rostro.

—Déjanos solos y que nadie entre a esta sala.

—Sí, señor —Se alejó el droide, cerrando el gran portón detrás de él.

— ¿Xiao Zhan? —Karian llamó pero no obtuvo otra respuesta más que un ligero sollozo, los hombros del alienígena temblaban. — ¿De verdad, Xiao Zhan? ¿Llorar porque uno de tus guerreros murió? Supéralo, ellos están entrenados para morir.

Xiao Zhan negó con la cabeza y sorbió con la nariz. —N-No sabes nada, Karian.

— ¿Qué no sé, Xiao Zhan? ¿Eh? ¿¡Qué no sé!? —Karian se levantó furioso de su asiento y caminó hacia la celda — ¡Me rechazaste! ¡Una y otra vez tuve que besar tu indiferencia! Estuve ahí para ti, todo el tiempo, hacíamos todo juntos...yo... ¡Yo era quien debía gobernar contigo, maldición! —Karian golpeó la celda, sin importarle el choque eléctrico que recibió. —Tu padre me lo prometió, tu padre me dijo que yo era el elegido para ti... ¿Por qué me rechazaste, Xiao Zhan?

Xiao Zhan negó con la cabeza —No lo entiendes.

—Déjame entender. Y dime ¿qué no entiendo? ¿Qué hice mal?

—No eres el elegido, Karian. Nunca lo fuiste.

—Tú también...—Karian apretó la mandíbula, odiando las palabras que salían del alienígena pelinegro, justo las mismas palabras que Peng Chu Yue le había dicho con burla. Esto no podía ser una coincidencia.

—Yi-Yibo...—Xiao Zhan comenzó a sollozar nuevamente y Karian empezó a perder la paciencia.

— ¿Yibo? —Karian alzó una ceja.

—L-Lo mataste...—Xiao Zhan apretó los puños tan fuertes que sus propias uñas penetraron la piel de su palma, sus nudillos se volvieron blancos. — ¡Lo mataste, maldito! ¡Lo mataste! ¡Y yo voy a matarte a ti! —Xiao Zhan alzó la mirada hacia Karian, deseando que su mirada pudiera asesinarlo lenta y tortuosamente.

—Oh —Karian se giró y se echó a reír — ¿Te refieres a tu perro guardián? —Rio más fuerte —Bueno, no me culpes. —Alzó las manos como gesto de inocencia — No es mi culpa que no haya podido esquivar un ataque.

Xiao Zhan sollozó con más fuerza y Karian lo miró con sospecha —Un segundo...no me digas que...Oh ya lo entiendo —Karian rio con amargura — ¿Con él te apareabas? ¿eh? ¿era tu compañero? ¿Tu pareja?

Xiao Zhan no respondió y Karian rio con más fuerza, burlándose de la situación.

—Oh, Xiao Zhan, dulzura, lo siento tanto —Karian se llevó una mano en el pecho fingiendo pesar —Pero su muerte es una demostración de que él no era para ti. ¿No lo ves? Deja de ser tan ciego. No vas a encontrar a mejor individuo que yo para gobernar, todo el que lo intente morirá y quedarás solo. Completamente solo. Llegará un momento en el que tu gente empezará a darte la espalda si no lo han hecho ya. ¡Reacciona, Xiao Zhan! ¡Ambos estamos destinados a estar juntos! ¿Recuerdas la leyenda? Nosotros somos esos protagonistas, ya hemos estado separados por mucho tiempo, ahora nos volvemos a juntar.


— ¡Karian! ¡Karian! —Un pequeño Xiao Zhan de cabello corto y negro corría hacia la pequeña habitación donde su más nuevo amigo se encontraba. Su padre lo había traído y había dicho que se quedaría a vivir con ellos por un tiempo. Para Xiao Zhan, esa era la mejor noticia que pudo haber escuchado. Era hijo único y no tenía nunca con quien jugar, bueno, tenía a Yue Yue, pero él siempre estaba ocupado tomando clases para mejorar su poder mental o algo así, él no lo entendía realmente.

Como sea, Karian era un niño muy lindo, Xiao Zhan pensaba. Era divertido, curioso, bastante gracioso aunque fácilmente podía decir que no era karniano, su acento al hablar era extraño, pero eso era lo que menos importaba ahora, tenía un nuevo amigo...y le gustaba.

Ahora mismo, Xiao Zhan había estado en la biblioteca y había encontrado un libro viejo que contaba una leyenda, había oído a su madre hablar al respecto y eso le dio aún más curiosidad. No esperaba por contárselo a su nuevo amigo.

Cuando entró a la habitación, encontró a Karian apoyado en la venta, observando las afueras del núcleo.

— ¿Karian? —Xiao Zhan preguntó con menos ánimo ahora, no le gustaba ver a alguien triste, lo hacía asentir triste también. A veces se odiaba por ser así de sensible, pero no podía evitarlo —¿Estás bien?

Karian se giró e intentó dirigirle una sonrisa a su amigo.

—Estoy bien, ven aquí —Karian lo llamó y Xiao Zhan caminó hacia él abrazando el libro en su pecho — ¿Qué tienes ahí?

— ¡oh! —Xiao Zhan agachó su mirada hacia el libro que tenía en sus manos —Lo encontré en la biblioteca de papá, es un libro bastante viejo ¿no es así? Casi tanto como el abuelo —Rio y Karian hizo lo mismo —Estuve leyendo algunas páginas, pero...quería leerlo contigo —Sonrió Xiao Zhan sintiendo un ligero ardor en sus mejillas.

—Oh, está bien, ¿quieres que lo lea en voz alta para ti? —Karian preguntó y Xiao Zhan asintió de inmediato.

—Cuenta la leyenda karniana —Karian comenzó — que hace millones de sofiris en el universo existían dos individuos que tenían prohibido estar juntos. Ambos sentían una atracción especial y la sola idea de permanecer separados los mataba en su interior —Karian se detuvo de pronto y Xiao Zhan pestañó un par de veces.

—Continúa...

—Hm, está bien, no podían estar juntos por dos razones: Uno por ser de razas distintas. Dos, ambos tenían un poder infinito, podían adueñarse de todo si así lo deseaban o simplemente destruirlo. Esto, significó una amenaza no solo para el planeta sino para el universo entero. Un día, uno de estos individuos fue capturado dentro de una cápsula; el otro, al ir a su rescate fue apresado de igual modo.

—Oh no —Xiao Zhan se llevó una mano a la boca y sus ojos comenzaron a aguarse.

—Descuida, seguro tiene un final feliz —Karian intentó tranquilizarlo y continuó —La persona que los aprisionó, dijo que tenían dos opciones: que uno de ellos sea eliminado o que fueran separados por siempre. De pronto uno de los individuos dijo que elegiría la segunda opción y el otro lo miró incrédulo pero rápidamente sabiendo el plan que tenía en mente. El sujeto que los capturó, asintió pero antes les preguntó si tenían algo que decirle al otro ya que serían separados. Uno de los individuos pidió poder tocar la mano del otro. Poder sentirlo por última vez. Su petición fue aceptada y juntaron las cápsulas lo suficiente para que ambos pudieran estrecharse las manos. Entonces sucedió, uno de ellos le estrechó la mano al otro el cual le correspondió. La mirada de ambos se oscureció y soltaron una oración que decía que ambos se volverían a juntar más allá de las estrellas. Y desaparecieron.

Los rostros de ambos Karnianos menores estaban enrojecidos tras haber leído la acción de estrechar las manos, ya que ambos sabían a qué conllevaba.

Karian carraspeó y cerró el libro —Aquí tienes. —Le entregó el libro.

—Hm, bueno, no fue un final feliz después de todo ¿crees que se volvieron a encontrar? —Xiao Zhan preguntó con un tono triste y Karian alzó una mano para acariciar la mejilla de Xiao Zhan.

—Sí, seguro se encontrarán algún día...o ya se encontraron.

— ¿Qué quieres decir?

—Bueno...—Karian agachó la mirada rápidamente y sus mejillas se tornaron de un color rojizo —Bueno... ¿Qué si ellos se reencarnaron en nosotros? Ya sabes... nosotros somos ellos pero no lo sabemos aún.

Xiao Zhan abrió los ojos y parpadeó un par de veces asimilando lo que su amigo le decía — ¿Nosotros? Pero dice que ellos sentían algo especial por el otro ¿sientes algo especial por mí, Karian?

El rostro de Karian no podía estar más rojo de lo que estaba ahora y empezó a jugar con sus pulgares por su nerviosismo.

—Eh pues... ¿tú? ¿Sientes algo?

—No —Xiao Zhan respondió alzándose de hombros —siento lo mismo que siento cuando estoy con Yue Yue, Nalea, Georg, Anis...—Xiao Zhan comenzó a nombrar a sus amigos.

—Oh...—Karian bajó la mirada muy decepcionado ahora, Xiao Zhan lo notó e intentó remediarlo de algún modo, no sabía que eso haría sentir mal a su amigo, no lo entendía ¿qué debía decir entonces?

—Ehm, aunque debo admitir que me siento más cómodo contigo, eres agradable —Xiao Zhan sonrió —Bueno, debo llevar el libro a la biblioteca de papá o se molestará mucho conmigo, ¡nos vemos luego, Karian!

—Nos vemos luego, Xiao Zhan —Karian respondió con una mínima de esperanza en su corazón.

AliensHikayelerin yaşadığı yer. Şimdi keşfedin