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Para Eros el verlos en la entrada de la casa fue una sorpresa sabía que con la llegada de sus primos era muy probable que sus padres también vinieran, su padre sabía que este confiaba ciegamente en ellos y que si algo estaba sucediendo los llamaría a ellos, a diferencia de Eliot que no le caían bien sus primos. Pero la mayor sorpresa de este fue ver la reacción de sus padres al decirles que había encontrado a su pareja y esta era una loba.

-¡Lo prohíbo rotundamente Eros Alexander Sanabria! No me importa nada de lo que me digas en este instante ¿cómo es posible que la pareja y futura reina de la manada sea una...?- el padre de Eros freno sus palabras al ver el enojo que emanaba de su hijo, sabía que estaba tocando un tema delicado pero no iba a apoyar esa relación.

-Pues lo lamento padre pero esa decisión no es tuya, fui bendecido por la diosa y ahora tengo a una mujer que sé que me quiere y que en su momento me va amar así como yo lo estoy comenzando hacer- Rafaelle miraba a su hijo, sabía que estaba dispuesto a defender a su pareja a capa y espada, el amor volvía loco a los cachorros pero este olvidaba que ya Eros no era un cachorro y está hablando muy enserio.

-Hijo por el amor de la diosa no podemos aceptar aun lobo en nuestra familia eso sería una abominación, no sabes lo que esa especie le ha hecho a la nuestra- dice su madre un poco más tranquila, en ese momento en la estancia, entro April junto a su hermano más pequeño Aron.

-¿Por qué pelean? mi hermano no ha hecho nada malo- dijo el chico más pequeño de los Sanabria haciéndole cara a sus padres.

-Es verdad lo que dice Aron, es más si están molestos también lo estarán conmigo porque les informo que mi pareja también es un lobo, no entiendo ese odio repentino hacia los lobos, ya hace mucho se le había mencionado la especie y no se habían comportado de esa manera- dijo una April serena.

-Hace algunos días estaba meditando y fue algo extraño como un alumbramiento, como si un recuerdo de hace muchos años llegara a mí y era de como esos pulgosos, nos acorralaban y asesinaban uno por uno, es como si la diosa nos fuera quitado esos recuerdos para que pudiéramos vivir en paz y ahora estando aquí no puedo creer que mis dos hijos estén con lobos, ahora falta que mi hijo más cuerdo y centrado me venga con algo parecido- dijo su padre sentándose en el mueble y su esposa junto a él.

-¿Las lobas son bonitas?- la pregunta de Aron fue algo fuera de lugar, pero aun así Eros le respondió.

-Son las más bonitas y a mí me toca la más hermosa de todas- su hermano de 15 años apenas no pudo evitar subir su pulgar y guiñarle un ojo a su hermano mayor – y si ustedes no la aceptan lamentablemente tendré que ceder mi puesto de rey de la manada a Eliot.

-¿Por qué habrías de dejarme a mí tu puesto, hermano?- la voz de Eliot se hizo prominente en la sala, April y Eros miraron a la chica a su lado y sus ojos casi se salieron de sus orbita.- dime hermano, ¿por qué tu tendrías que cederme tu puesto como rey de nuestra manada?- la chica a su lado no sabía de qué hablaban estas personas no olían a lobo, pero si sabía que no olía a un humano cualquiera, sea lo fueran no eran ni lobos ni humanos.

-Nuestro padre no acepta mi relación con Emma- dijo Eros a su hermano aun mirando a la mujer a su lado- pero creo que eso no sea lo importante en este momento, veo que traes visitas.- dijo Eros refiriéndose a su acompañante- April llama a todos diles que vengan ya, tenemos muchas cosas que discutir y diles que lo más importante es que Eliot tiene algo que contarnos.- dijo Eros mirando a su hermano ahora, este solo asintió viendo como April se iba hacer las llamadas correspondientes.

***

Si las miradas mataran todos en la habitación estarían muertos, Jayden, Ezrra, y Emir se encontraban sentados en la estancia junto a Eros y los papas de este, ellos no sabían qué demonios estaba pasando.

Sol De Medianoche... Luna De PlataWhere stories live. Discover now