// And this is how starts, take your shoes off in the back of my van //
Las pocas luces blancas que tenía el club estaban siendo utilizadas para alumbrar la barra mientras que en la pista había una luz roja tenue combinada con una azul, hacia calor. Mucho calor para mi, regresaba del baño donde había ido a refrescar me mientras Matty me esperaba ahí en la barra, una luz blanca alumbraba su cara prendiendo un cigarro hecho por el mismo y podía asegurar que el chico de la barra era el dealer que le había vendido la marihuana, reí para mis adentros de alguna u otra manera el siempre conseguía lo que quería. Su mirada choco con la mía y camino hacia mi mientras el chico de la barra me daba aquel vaso rojo que yo traía hace unos instantes y una bolsita de plástico más.
Me encontró en la pista y me entrego mi vaso, su siguiente acción fue inclinarse levemente hacia mi oído, pude sentir su respiración chocar contra este.
-Todo bien querida? -su acento británico me obligaba a estremecerme, su aliento estaba caliente y su voz pacífica como siempre.
-Si, todo bien Matty -mencione no sin antes tener que acercarme a su oído y decírselo casi a gritos- debería irme ya Nathaniel debe estar esperándome.
-Que?! No! Se supone que esta noche sería sólo tu y yo -acerco el vaso rojo entre mis manos un poco más a mi y el se apegó también- aún no a empezado la fiesta.
-Llevamos aquí tres horas..-rodee los ojos y cuando los regrese a el estado normal de aquello el tenía algo en la boca pero no sabía que y no quería comprobarlo- vamos llévame a casa.
Mis últimas palabras parecieron invisibles para el, sus largos dedos se colocaron en mi espalda y me atrajo a el, una de sus manos recorrió mi espina dorsal hasta llegar a mi cuello. Sus ojos estaban más negros de lo normal, su respiración agitada y sudaba levemente por la cantidad de personas en aquel lugar pero aún así seguía viéndose perfecto.
-Lo siento -murmuro y lo mire confundida, luego la confusión de fue.
Tenía los labios de Matty pegados a los míos moviéndose rítmicamente y seguía el beso, entre abrió mi boca con su lengua y depósito una pastilla en ella, se separó del beso y empino mi bebida para que tragara la pastilla, sonrió de lado y no tenía ganas de contestar, sólo quería besarlo más no me importaba el hecho de que me hubiera dado droga hace dos segundos.
Unas sirenas de policía se escucharon por sobre todo. Matty y yo intercambiamos miradas, tomo mi mano fuertemente y salimos corriendo entre la gente la cual también quería irse, las fiestas clandestinas son el blanco perfecto para llevar adolescentes problemáticos a la cárcel. Llegamos a la van de Matty, es blanca y parece de carga pero por dentro esta bien equipada, subimos por detrás para que los policías no lograrán vernos y quisieran interrogarnos.
Sentía más calor que en la fiesta, ahora yo estaba sudando, y no podía dejar de pensar en los resecos labios de Matty y su sabor a vino en ellos sobre mi, me removí tratando de dejar esos pensamientos.
-Esperaremos a que se vallan los de azul y te llevare a casa -su brazo paso por mi cintura y beso mi cabello, me agarre de el- te gusto?
-Las pastillas? Si -recargue mi cabeza contra la suya y di un pequeño suspiro- el beso? También.
-Matty me empujo contra el- No se porque lo hice, pero tampoco lo lamento -sonrió maliciosamente y se acerco a mi lo bastante para que pudiera volver a sentir sus labios contra los míos- y lo volveré a hacer.
