✰彡No Kidding I Miss You↷ pjm

Epílogo

SoRa mantenía su mejilla apoyada contra la palma de su mano, su brazo apoyándose sobre la mesa y mirando hacia el frente.

Park y Kim no habían dejado de mimarse desde que habían llegado al restaurante, una salida normal de amigos se había convertido en una especie de cita, en la cual obviamente ella no estaba invitada.

Resopló aburrida y con un puchero en los labios cuando miró a YooRae susurrarle unas cuantas cosas al mayor, recibiendo una risita por parte de éste.

Se sentía apartada mientras ellos estaban en su propio mundo de estrellitas de colores y corazoncitos empalagosos de distintos tamaños a su alrededor.

—Sinceramente no recuerdo que fueran tan cariñosos— refunfuñó en voz baja para ella misma —A veces me arrepiento de haberlos ayudado— suspiró una vez más. La verdad era que no, estaba más que feliz por sus amigos pero se sentía un poco excluida.

Una fugaz mirada al mesero hizo que de repente no se sintiera tan miserable ahí.

Un chico de cabello negro y hombros anchos capturó su atención, éste iba dejando la comida en las mesas y se retiraba a la cocina para ir a recoger más.

Sonrió y es sólo entonces cuando decidió interrumpir a los dos enamorados.

—¡Chicos! ¿Ordenamos ya? Muero de hambre— frotó su estómago para aclararlo más.

Jimin separó sus labios de la comisura de la pelinegra y sonrió avergonzado —Claro, ¿qué quieres, Raenie? —acarició la mejilla de la nombrada.

YooRae giró la cabeza para besarle la mano y enseñarle una de sus grandes sonrisa —Pasta, ¿tú quieres eso?

—Sí quiero, ¿entonces podemos pedirlo?—la abrazó por el cuello aprovechando la cercanía.

—Claro que sí— acarició los rubios cabellos con cariño.

SoRa rodó los ojos cuando vió a ambos sonreírse mutuamente. Amaba a sus amigos pero a veces eran increíblemente cursis.

Se acomodó mejor en la silla cuando miró al apuesto mesero acercarse hacia ellos con la intención de tomarles la orden, suspiró nerviosa y se peinó rápidamente el cabello.

—¡Hola! Bienvenidos, ¿desean pedir su orden ahora?

SoRa sonrió sintiendo sus mejillas enrojecer —Sí, lo haré por ellos, no te preocupes— añadió cuando vio al mesero mirar en dirección a sus cariñosos amigos, los cuales seguían en su sesión de mimos.

—De acuerdo— el chico preparó su libreta y se acercó más a la altura de la chica.

Con la cercanía, SoRa pudo oler perfectamente el perfume que el chico traía puesto. Era como un toque de coco con algo de vainilla.

Pensó seriamente en lo quería hacer. Claro que ella quería conseguir el nombre y el número de aquel mesero frente a ella, pero de igual manera se arriesgaba a que aquel chico la rechazara.

—¿Podría pedir tres platos de salmón y pasta?— el chico azabache asintió escribiendo sobre las líneas de su libreta.

SoRa se sintió algo decepcionada al notar que el mesero no le dirigía ni la más mínima mirada.

—Lo traigo enseguida— dicho eso, se alejó de la mesa con algo de prisa.

SoRa puchereó mientras cruzaba los brazos y se dejaba resbalar un poco en la silla. ¿En serio tenía tanta mala suerte?

Cuando el chico azabache depositó la comida sobre su mesa, un acto inesperado fue lo que hizo a SoRa casi derramar su bebida sobre el bonito mantel.

Claro que reconocía esa hoja y esa letra, ¡el mesero había escrito su nombre y su número para ella!

Sonrió cuando vio el nombre SeokJin y un par de halagos para su persona. No pudo evitar sonrojarse cuando leyó que se veía realmente linda y adorable para el mesero.

Tal parece que Jimin y YooRae sólo habían salido un momento de su burbuja para mirarlo interrogantemente y con un par de jadeos sorpresivos al ver aquella nota.

—Nuestra SoRa ya se está alocando—bromeó YooRae, recibiendo un codazo con poca fuerza de parte del mayor.

—No son los únicos con encantos— les sonrió a ambos para comenzar a comer.

Supo que desde la otra parte del restaurante, un chico azabache le observaba con total ternura e interés.

Fin

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Muchísimas gracias a Jjuunggkook por permitirme adaptar está maravillosa obra de arte💘😭