𝐌𝐫 𝐒𝐞𝐝𝐮𝐜𝐭𝐢𝐨𝐧 | 𝐁𝐚𝐣𝐢 𝐊𝐞𝐢𝐬𝐮𝐤𝐞

01

"Solo divierte y disfruta esta noche ______".

"Pero mira nada más ese cuerpo, Dios es un chico muy guapo, ¿Que opinas ______".

"No arruines el momento, vamos ______ disfruta es tu última noche como soltera".

"Miren lo que traje, con esta deliciosidad nos divertiremos un rato sean prudentes en beberla es muy fuerte".

"Bueno que esperamos, que empiece show para ______".

Sus movimientos, sus malditos movimientos me hipnotizaban era como como si estuviera probando el fruto prohibido, sus ojos marrones no dejaban de ver los míos mientras se movía sensualmente solo para mí ¿Lo estaba disfrutando? Claro que sí, pero ¿por qué sentía una presión en mi pecho que hacía sentirme culpable?

De pronto oscuridad.

Estaba en un cuarto completamente oscuro, gracias a la luz de la luna que daba por la ventana podía ver su rostro por alguna razón se me hacia conocido, estaba sobre mí, podía sentir su respiración caliente y sus besos húmedos sobre mi cuello, subió su mirada y sus ojos conectaron con los míos, solo había lujuria y deseo en sus ojos.

-Solo dejate llevar- dijo el desconocido con una voz ronca mientras me besaba ferozmente.

Mordio mi labio inferior haciéndome gemir, él sin desaprovechar esa oportunidad metio su lengua explorando mi boca.

Se sentía tan bien, lentamente subió mi vestido rojo su mano recorrió mis piernas abriendolas de una, él se posicionó en medio de ellas dando embestidas falsas.

Su miembro por encima de la ropa hacía contacto con mi braga ya húmeda, quería más así que me moví creando más contacto entre nuestras partes, el entendió lo que quería separándose del beso bajo lentamente mi braga entre besos y mordidas que daba en mis piernas.

Quede expuesta a él, el desconocido bajo su cremallera y luego bajo su pantalón junto con su boxer, su gran miembro salió al descubierto y solo me preguntaba si todo eso podía entrar en mi.

El saco un condón abriendolo y colocándolo en su miembro.

-no hace falta prepararte, mira lo húmeda que éstas- metió sus dedos dentro de mi intimida -Pero si quieres lo hago-

-No hace falta, solo ponlo dentro de mi- él soltó una carcajada y posicionó su miembro en mi intimidad pero no entraba solo estaba jugando -Maldita sea solo ponlo dentro-

-Que intensa- escuche su risa y sin previó aviso me penetró, me beso intensamente mientras se movía.

Sus movimientos no eran delicados y suaves al contrario eran salvajes y fuertes, sus besos bajaron poco a poco hasta llegar a mis pechos, chupo uno de ellos mordiendolo y con el otro masajeo a su antojo, sus penetraciones no bajaban de intensidad.

Era la mejor sensación que había sentido en toda mi vida, realmente lo estaba disfrutando.

-Que mierda fue eso- me levante asustada, agitada, con el corazón latiendome a mil, y con un maldito dolor de cabeza sin mencionar el insoportable dolor en mi cadera, lleve  una mano a mi pecho confirmando como poco a poco el latir de mi corazón iba a la normalidad. _solo fue un sueño o más bien una pesadilla, relájate _____- comence a reírme del miedo, traquilizándome un poco más.

Pero todo se fue a la mierda cuando mi mirada inspeccionó la habitación donde estaba dándome cuenta que no era mi habitación, con el Jesús en la boca y lágrimas queriendo salir de mis ojos, baje mi mirada descubriendo que estaba completamente desnuda.

-Que estupidez he cometido-

Con el pecho doliendome y el maldito dolor de cabeza que no ayudaba, el sonido de una llamada entrante en mi celular me puso alerta sacandome de mis pensamientos con las manos templando logre contestar.