Time / Soukoku

➺Capítulo dieciséis: Invierno & Primavera

—¿Por qué no me despertaste? —El tono de voz de Chuuya es taciturno al preguntar.

—Dormías como un bebé, no pude hacerlo—Tachihara recoge los hombros y sonríe al decirlo.

—No pensé que llegarías tan tarde—Chuuya lanza ese comentario al dirigirse hacia la nevera.

—Hice una parada en Kōhoku—Tachihara responde al regresar su atención al libro—¿Cómo van las reparaciones de tu casa?

—¿Me vas a extrañar cuando regrese a mi casa ?

—Extrañaré tu comida.

Chuuya muestra el dedo medio en lo alto por el comentario de Tachihara quien imita ese gesto, luego abre la nevera para servirse jugo.

—Tachihara ¿me pasas las galletas con nueces?

—Claro —Tachihara abandona la silla y abre un cajón del estante para buscarlas, hurga por un largo tiempo y finalmente hace una mueca—Viejo, parece que se acabaron.

—Oh, bueno no importa—Chuuya da la espalda y se dispone a preparar la cena.

—Aún me parece impresionante que hicieras un agujero de ese tamaño en tu sala.

—A mí también me sorprende... — Chuuya ríe nervioso. El recuerdo del hombre de sombrero destruyendo la pared de la casa aparece en sus pensamientos lo que le provoca un leve escalofrío, pero niega con la cabeza alejando esa imagen mental — Mejor cuéntame de tu día.

—Nada interesante, aproveché para dar un paseo.

—Oí que el pronóstico de Kōhoku era lluvias torrenciales ¿Cómo pudiste dar un paseo con ese clima?—Le observa por encima del hombro.

Tachihara se muestra rígido y afianza el agarre con el que sostiene el libro.

—Es sólo lluvia, me gusta la lluvia.

—Es sólo una pregunta, no tienes que ponerte nervioso.

—Pues sí, llovió por esa zona pero no fue la gran cosa.

Chuuya desliza su mano hasta la perilla del cajón de la cocina para abrirlo y hurgar dentro.

— ¿Puedo preguntarte algo?—Chuuya murmura mientras le da la espalda.

—Sí, dime.

—¿Qué hiciste con mi amigo?

Chuuya da vuelta levantando un cuchillo hacia su "amigo" y en ese momento arremete en su contra, sin embargo, Tachihara consigue detenerlo, las uñas de éste crecen y se convierten en garras afiladas.

—¿Cómo supiste que no era él ?—Tachihara ríe alegremente.

—Tu historia es convincente, pero no es posible que sea cierta—Chuuya continúa sosteniendo el cuchillo y empujándolo contra Tachihara, pero no surte efecto, es más fuerte de lo que aparenta.

—¿Por qué razón?—El intruso cuestiona con un brillo en los ojos.

—Porque Tachihara es alérgico a las nueces así que jamás compra esas galletas, además el tren que tomamos nunca pasa por Kōhoku.

Tachihara retrocede para tomar distancia y empieza a reír a carcajadas.

—Que conmovedor —Aplaude mientras camina por la habitación.

—Tampoco eres humano.

Chuuya lo sabía desde el inicio. La única ventaja de tener los ojos de la muerte es que puede ver los relojes y esta persona frente a él no posee uno, lo que significa que no es humano. Pero esa información no debe ser revelada.