—Estas bromeando.

—No, puedes revisar mi celular y todo. Dexter capturó una imagen y la compartió en twitter.

No puedo evitar reír mientras me inclino al lado de Doug para verlo trazar, él se detiene y aunque no me mira, enarca sus cejas.

—Es algo… distractor que mientras intento dibujar tu estas inclinada de tal manera que estoy viendo debajo de tu camisa traslucida, digo no me quejo de la vista, pero quiero hacer un buen dibujo para ti.

Me incorporo y camino hacia el sofá, donde me siento sin decir ni una palabra. Los hombros de Doug tiemblan, él se está riendo de mí, lo cual no es nuevo.

—Decidimos vivir juntas porque nos llevamos bien y necesitamos nuestro espacio—digo, él asiente con la cabeza—y el apartamento es asombroso.

—Suenas entusiasmada.

—Lo estoy, estoy independizándome.

Permanecemos en silencio y recuesto mi espalda del sofá mientras me dedico a observar su espalda contraerse mientras dibuja, además de la buena vista de su trasero. Es tentador visualizar la banda elástica del bóxer que está usando.

Estos son los pensamientos de una chica virgen.

—Leí algo sobre ti en varias redes sociales, principalmente porque era tendencia.

—¿Qué cosa?

—¿te suena Dilla?

—No, no me suena ¿Quién es esa?—murmura.

—Pues es tu nombre unido al de una chica que llaman Milla.

Doug deja de trazar mientras se da la vuelta, frunce mucho el ceño antes de resoplar con molestia.

—¡Joder! Solo tomamos algo luego de conocernos—dice—no fue la gran cosa, una salida, su apartamento y ya y fue hace meses, solo que una foto se filtró justo ahora de mi saliendo de su apartamento.

Solo lo observo “fue hace meses” bueno, no me importa cuando fue: durmió con Milla, a todas estas ni idea de quien es Milla.

—¿Quién se supone que es Milla? No me suena de nada.

—Es una bailarina americana, bueno, específicamente estadounidense—me responde escrutándome con la mirada—solo una chica con la que dormí hace mucho tiempo Hilary.

—No es mi asunto.

—Pero te veo curiosa—dice riendo—hace unas semanas está aquí en Londres, tiene un nuevo contrato, por alguna razón tiene mi número y acepté tomar un café, tomaron una foto y luego mágicamente se filtraron fotos antiguas de mi saliendo de su apartamento en Estados Unidos.

—¿Fue en la gira?

—Que va, fue mucho antes—dice volviendo al block—no existe ningún “Milla” y suena terrible.

—Sí, suena a enfermedad parasitaria—digo sin proponérmelo, él se detiene y luego comienza a reír.

—Debo asegurarme que Max aclare esto, no quiero más rumores. He estado tranquilo durante un tiempo y aun así me han estado inventando novias, que agotador.

—Ya sabes lo que dicen “crea fama y acuéstate a dormir” y tú, ya tienes una gran fama.

—Sé lo que digo, y si digo que no tengo nada con ella y con nadie es porque es cierto—dice serio y por un momento parece molesto.

—De acuerdo.

Permanecemos en un silencio, creo que lo he hecho molesta un poco. Parece que realmente desde hace un tiempo él no anda en de pica flor con mujeres, pero la prensa rosa puede confundir tanto.

El Deseo Prohibido de Doug (BG.5 libro #2) Disponible en Librerías.Where stories live. Discover now