Capítulo 9

1.1K 109 7
                                    

MARYERE POV'S

Continué llorando. Yo tenía mucho dolor guardado y, a veces, cuando las cosas se tornan difíciles, la vida nos da la oportunidad de sacar lo que nos pudre el alma. Además, yo tenía que explicar a ese chico de cabellos rojos y ojos grises porque no podíamos ser papás, porque no podíamos estar juntos.

«¿Será que él lo va a entender?» Realmente no lo estaba esperando así. 

No es como que le pidiera permiso, tal vez a él ni siquiera le importaba que yo estuviera embarazada, pero quería creer que le dolería un poco y me daría el valor de no hacer algo que no quería. 

«¿Será que puede pasar?»

—El papá de Jean era amigo de mi padre —expliqué—, creo que estaba enamorado de mi mamá y cuando ellos murieron decidió hacerse cargo de mí. Un año después de qué me mudé a su casa Jean y yo nos comprometimos, aunque más bien el decidió por sí solo, a mí solo me avisaron y no podía hacer más que acatar órdenes. 

Mis palabras me hicieron caer en cuenta de una verdad que muchas veces fingía no ver.

»Cuando se trata de ellos solo eso puedo hacer, acatar órdenes. Ellos son realmente poderosos y peligrosos y aunque, como él dice, me puedo acostar con quien yo quiera, no puedo hacer cosas como estar embarazada, mucho menos dar a luz a un hijo que no sea de él... lo siento Castiel —dije llorando de nuevo. 

Castiel seguía sin decir nada y yo estaba, más que molesta, decepcionada.

«Claro que a él no le importa —pensé—, no es cómo si se hubiera enamorado de mí». 

Eso me dolía bastante, porque yo si lo amaba. Castiel había logrado, con sus dulces notas musicales, meterse en mi alma esa noche.

Por eso intenté arrastrarle a mi paso. Por eso lo jalé y empujé a mi gusto. Pero no logré atraparlo. Ahora que no decía nada lo sabía.

Me sentí patética por disculparme, por pensar que eso que a mí me mataría a él le haría daño y lloré ahora de rabia. Levantándome de donde estaba lo empujé hasta la puerta de la casa.

—¡Largo —grité—... lárgate! —y él solo se fue.


Continúa...


ERES EL DEMONIOWo Geschichten leben. Entdecke jetzt