—¡Craig! ¿Te comerás eso? —la voz de Clyde le hizo salir de sus pensamientos. Lo vio de reojo, notando como hacía un ligero puchero con la mirada insistente sobre un pedazo de torta que había dejado de lado.

—No. —respondió, acercando la bandeja cerca de él. Sonrió de inmediato tomando el trozo.

—¡Gracias! —empezó a comer ante la atenta mirada del azabache.

Se mantuvieron en silencio, más parecía que a pesar de eso que Craig estuviera mirándole por tanto tiempo le empezó a incomodar. Se limpió el resto de migajas de las mejillas.

—¿Pasa algo? —le preguntó el castaño.

—Solo pensaba, no me has dicho nada sobre tu club. —Clyde hizo un gesto de sorpresa.

—¡Es cierto! ¡Tienes que venir! —le tomó del hombro moviéndolo de lado a lado. —¡Lo siento! Es que hemos practicado como locos para competir contra unas escuelas cercanas. ¡Debo presentarte a mis compañeros, son geniales!

Craig solo le observó sin decir alguna palabra. De manera instantánea giró su cabeza al ver entrar a alguien. La cabellera de Wendy apareció entre los asientos para acercarse a ellos con prisa.

—¡Chicos!

—¡Pero que susto me diste! —se quejó el castaño.

—¡Tengo que hablar con ustedes! ¡Es urgente! ¡Ahora! —literalmente los jaló consigo hasta la salida con algunas miradas curiosas sobre ellos.

—¡Wendy, Wendy! ¡Me haces daño, ay! —Clyde intentaba respirar tras ser arrastrado por la ropa. Craig simplemente la seguía con gesto neutro.

Los pedidos del castaño fueron ignorados hasta llegar el lugar donde anteriormente habían usado para reunirse.

 La luz fue encendida tras la puerta ser cerrada. Fue entonces que Clyde respiró.

—¡Eres muy mala! ¡¿Qué es lo que te pasa?! —se sobó la zona del cuello donde estaba enrojecida.

La azabache abrió la puerta. Tras percatarse de que nadie estuviera cerca de los pasillos volteo a verlos.

—Escuchen, disculpen que los haya traigo aquí de esta manera. He hallado algo muy importante y tenían que saberlo.

—¿Y no podías ser más disimulada? ¡¿Qué tal si alguien nos sigue hasta aquí?!

—No lo harán, todos piensan que este sitio esta embrujado. —Clyde frunció el ceño.

—Me estás confundiendo más.

—Miren, encontré esto en una zona muy apartada de la biblioteca. —se montó en un banquito para tomar algo de la estantería. Mostró un par de libros bastante antiguos por su apariencia. —Los estuve leyendo, bueno, lo poco que pude rescatar. Faltan páginas y se ha desgastado con el tiempo. —se acercaron para observar más de cerca. Clyde estornudó. 

Le observaron para que Wendy continuara hablando.

—Aquí dice que hace mucho tiempo, hubo un lugar donde empezaron a aparecer criaturas que el humano nunca había conocido jamás. Tuvieron tanto temor que hicieron todo lo posible para exorcizarlo, pero en ninguna parte dice si se pudo lograr o que sucedió después. —pasaba las páginas mostrando algunos dibujos que eran representaciones de los seres que mencionaba. —Como les dije, parece que alguien arrancó páginas y solamente quedaron muy pocas de ellas.

—¿Y qué más dice? —preguntó Craig.

—Se dice que fue entonces que los humanos empezaron a... Ya saben, procrear con ellos. —el castaño hizo una mueca de desagrado.

—¡¿Qué?! ¡Están dementes! —le hicieron un gesto de que guardara silencio.

—Clyde, no subas tanto la voz. —vieron hacia la puerta. —Tal vez alguien pase cerca, después de todo los demás pisos suelen usarlos como almacén. —Craig siguió observando las demás páginas. —Pero eso no es todo, parece que los que lo hacían y eran descubiertos sufrían alguna clase de castigo.

—¿Cas-castigo? —tembló Clyde. —Es-esto me está dando mucho miedo...

—No sé cuál exactamente, he estado buscando pero es lo poco que he logrado transcribir es eso. Sé que es poco pero... —Wendy estiró los labios.

—¿Cuál crees que sea el lugar que habla el libro? Tal vez es algo que influya a la Iglesia, por alguna razón debieron haberlo modificado. —el azabache estaba ansioso y curioso tras la información obtenida.

—...Creo que es aquí. —los ojos violetas se movieron con inquietud por la habitación. —No creo que haya otra explicación, a lo mejor por eso es que quieren reclutar padres y monjas con tanta necesidad. —sus palabras los dejaron callados por un momento.

—¿Y por esa razón hayan esas cosas están ocultas para impedirlo? —intervino Clyde.

—Probablemente.


𝟢𝟥/𝟣𝟢/𝟤𝟣: Capítulo editado.

𝐒𝐞𝐧̃𝐚𝐬 ¦ CreekWhere stories live. Discover now