SungChan salió de su "escondite" debajo de las cobijas y se acercó a ellos.

—¡Deseo que se larguen! —sopló la velita del pastel con coraje y golpeó el pastel por debajo, haciendo que su hermana se lo embarrara en toda la cara y parte del pecho.

—¡SungChan! —gritó su hermano con voz grave.

—YoonOh, no—SooJung lo tomó del brazo y lo jaló hasta la cocina.

—Todos la perdimos—sollozó—. No es el único herido aquí, así que no puede comportarse de esa manera.

—Fue mi culpa—dijo limpiando los restos del pastel de su cabello—. Sabemos que mamá lo consentía con sus pasteles, así que le prepararemos el pastel de mamá.

—¿Estás loca?

—Desesperada—suspiró—. Le ayudé a mamá a preparar pasteles dos o tres veces, así que puedo intentarlo.

No hubo necesidad de decir algo más porque su hermano corrió al supermercado para comprar lo necesario.

Pasaron toda la tarde intentando igualar el pastel de su madre, pero cada intento era inútil. Los pasteles sabían demasiado bien, pero no como los de su madre.

Su padre llegó al atardecer y al verlos llenos de harina y chocolate, sonrió por primera vez desde el fallecimiento de su esposa. Luego de probar todos los pasteles y elegir el que más se parecía al de BoAh, subió por su hijo para poder celebrarlo fuera de su habitación.

SungChan se mofó al ver todos los pasteles, pero se sentó para probar el que su hermana le ofrecía.

—Seguí la receta de mamá—sonrió.

Se llevó un pedazo a la boca e inmediatamente lo escupió con una cara de asco.

—Seguiste su receta, pero no es como el de ella.

—Pero sabe bastante bien—habló su hermano mayor cruzado de brazos.

—No. Sabe del asco.

—Tu hermana lo intentó...

—¡Estoy harto de que lo intente! —gritó con voz chillona—. ¡No es mamá y nunca lo será!

Los ojos de la chica se aguaron a más no poder.

—¡Deberías de estar agradecido! —YoonOh se acercó a él amenazadoramente—. ¡¿Crees que ella está muy a gusto de hacernos la comida y estar al pendiente de los tres?! ¡Maldito egoísta!

—YoonOh—SooJung dijo entre sollozos.

—¡Solo piensas en ti y en tus sentimientos! ¡Todos estamos deshechos! ¡Todos extrañamos a mamá!

YunHo lo tomó del brazo para evitar que se acercara más al menor.

—SungChan, a tu habitación—habló YunHo serio—. Y tú, YoonOh, sal al jardín a calmarte.

Ambos se quedaron en su lugar mirándose con ganas de golpearse.

—¡Ambos, ahora! —su padre golpeó la isla de la cocina con la palma de su mano.

Ambos chicos rodaron los ojos y fueron a donde su padre les dijo.

Luego de un par de semanas, SungChan se sinceró con su padre. Ambos prometieron que tratarían de mejorar su comunicación padre e hijo y acordaron ir a terapia con el resto de la familia.

Bizarre [JaeYong]Where stories live. Discover now