I. Consulta.

6.2K 615 1.3K
                                    


ADVERTENCIAS: posible OOC sobre todo de Jiang Cheng que se muestra como un hijo muy mimado.

.

.

Estaba esperando con los nervios de punta en aquel consultorio. Definitivamente no era su mejor día y es qué, ¿cómo se le pudo ocurrir hacer tal cosa? No era un joven estúpido de diecinueve años que quería experimentar cosas nuevas, por supuesto que no. Jiang FengMian era un respetable hombre adulto de cuarenta y siete años, padre de familia y jefe de su propia empresa; estar en las condiciones en las que estaba en ese momento eran verdaderamente deplorable.

Él estaba pensando en lo desafortunada que era su vida cuando llamaron a la puerta y acto seguido el doctor al que esperaba al fin entró.

– Muy buenas tardes, señor... – el joven médico leyó su tabla portapapeles para enterarse del nombre de su paciente – Liu.

Así es, su problema era tan vergonzoso que fue a la clínica gratuita más lejana que pudo encontrar y además dio un nombre falso.

– Buenas tardes doctor...

– Lan, mi nombre es Lan XiChen y yo me encargaré de usted el día de hoy, la enfermera en urgencias me informó que requería un doctor en lugar de una doctora – explicó XiChen.

FengMian sintió que la cara se le caería a pedazos por la vergüenza.

– Es correcto – respondió el hombre mayor, con cierto grado de incomodidad que el doctor pudo notar.

El hecho de que el paciente no estuviera esperando sentado en el consultorio y que además pidiera a un doctor hombre, ya decía mucho acerca del problema.

– Bien señor Liu, como ya le ha dado sus datos a la enfermera, entonces por favor explíqueme qué es lo que tiene– pidió XiChen.

FengMian dio un hondo suspiró y pensó que mientras más rápido dijera lo que ocurría con él, más rápido terminaría con esa agonía.

– Yo... lo siento – suspiró de nuevo, realmente se sentía un cobarde idiota – esto es realmente vergonzoso para un hombre de mi edad.

– Oh – el doctor negó con la cabeza – no se preocupe señor Liu, yo soy su médico y por supuesto que actuaré de forma profesional, puede estar seguro al respecto.

– Lo sé, es solo que todo lo que implica me sigue pareciendo vergonzoso para mí mismo, yo... – retiró su saco de su brazo encima su abdomen, y lo asentó en una de las sillas que se encontraban ahí – tengo un problema en mi zona íntima.

Aquella confesión había hecho que Jiang FengMian comenzara a sentirse peor de lo que ya se sentía.

– Entiendo, era como imaginaba – dijo el doctor provocando que el hombre maduro se tocara la frente y cerrara sus ojos un momento – no se preocupe señor Liu, explíqueme cuál es el problema por favor ¿o prefiere que pasemos directo a la revisión?

– ¡No! – alzó la voz de inmediato - No, por favor. Creo que puedo explicarle y tal vez no haya necesidad.

– De acuerdo, entonces le escucho – respondió el doctor con tranquilidad.

Una profunda exhalación abandonó la boca de FengMian.

– Me duele... y hay una herida que no sana y creo que... está cicatrizando de forma incorrecta – dijo con trabajo.

Lan XiChen entrecerró los ojos.

– Bien, ¿a qué se debe esa herida?, ¿cómo se la hizo? – preguntó con seriedad mirando a su paciente.

Jiang FengMian me odiaWhere stories live. Discover now