Prologo

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Normalmente, para un padre alga tan poderoso como Mark Tomlinson, tener un hijo omega significaria una verguenza terrible, sin embargo, solo él sabe por lo que tuvo que pasar para que ese pequeño y su madre estuvieran junto a él en este momento.

Jay Tomlinson, habia tenido tres abortos en los tres años que estubo intentando tener un bebé. Asi que cuando ya no tenia esperanza alguna, cuando pensaba que era una mala omega por no poder darle un hijo a Mark, se embarazo alfin. No obstante, el miedo por perderlo, nuevamente se apodero de ella y ya no le quedaban esperanzas para luchar por dar a luz a ese niño. Por el contrario, las ganas de Mark, provocaron en él la añoranza por cuidar de ambos como si de un cristal hermoso se tratase,

Él se ocupaba de ella, a cada instante, si necesitaba algo o se le antojaba cualquier cosa, Mark estaba dispuesto a complacerla. Ante estom tuvo que contratar personas que lo reemplazasen en su trabajo puesto que a pesar de ser un alfa, lamentablemente no podia dividirse en dos y hacer las dos cosas. Asi que solo dedico cada instante de su vida a cuidar a su esposa, su indefensa omega.

Jay pese a los cuidados enfermaba constantemente, pero al ver que su marido ponia todo de su parte, ella intentaba sacar fuerzas de donde no las habia para que no los atacara las penurias ni la mala suerte, perder una vez mas a este bebé.

Y asi fue, luego de los cuidados y la atencion. A los ocho meses, Mark se encontraba en la sala de espera, suplicando porque todo saliera bien.

Jay habia dicho que no deseaba saber el sexo del bebé hasta que naciera, puesto que no queria emocionarse y adelantar las compras para vestir al niño o niña y al final todo resultase mal, como las tres veces anteriores. Asi que, la intriga y la suspicacia consumian al pobre alfa que se encontraba sentado en medio del pasadizo vacio de uno de los mejores hospitales de Londres.

Finalmente, el doctor salio quitandose la mascarilla del rostro, en ese momento Mark sintio que el corazon se le salia de su pecho, la garganta se le secaba y el piso comenzaba a moverse ajetreadamente, jamas habia estado tan nervioso en toda su vida, ni siquiera en el trabajo donde tenia que con intriga esperar la decisión de un juez o un jurado. Nada se comparaba a esto, lo unico que queria era que le dijeran que su bebe habia nacido sano y salvo.

- ¿Como esta? - pregunto con las manos temblorosas y sudadas

- Tuvimos algunas complicaciones - el rostro de Mark se contrajo - pero su hijo esta a salvo al igual que su espora, quien por supuesto quiere verlo.

Mark no le dio ninguna respuesta, inmediatamente despues de que el doctor le confirmara que Jay y su bebé estaban bien, empujo la gran puerta blanca de la sala de partos y corrio hasta la camilla en donde su omega estaba recostada, cargando a su hijo. Mark suspiro, de alivio y Jay volteo a verlo dandole una sonrisa gigante. El alfa se aproximo hasta ella y le dio un beso para luego acariciar la pequeña cabeza del niño.

- Es un varon Mark - dijo entusiasmada

El rostro de Mark parecia comedia, su boca se ensancho hasta que sus mejillas comenzaron a doler y las lagrimas comenzaron a deslizarse lentamente por sus mejillsa. Comenzo a besar a su esposa, puesto que despues de todo lo habia premiado con un niño. que quizas al crecer  sea un gran alfa como su padre.

- No puedo creerlo - hablo limpiandose las traviesas lagrimas de sus cachetes

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Era muy pcoco probable que un varon sea un omega, asi que Mark crio al pequeño louis como un alfa, le enseño a pelear, jugar futbol y aprender el arte de hablar y engañar, como si estuviera recitando una verdad inedita, don que usaba para escaparse de los gritos de Jay cuando hacia alguna travesura.

The Rich Omega * Larry ❣Donde viven las historias. Descúbrelo ahora