✦ Capitulo 10: Maldita Poción ✦

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𝐋𝐞𝐢𝐥𝐚:

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𝐋𝐞𝐢𝐥𝐚:

Después de dos semanas por fin había llegado el jueves que tanto esperábamos. Según la profesora McGonagall, el profesor Lupin se estaba recuperando por lo tanto este sería el ultimo día en el que los alumnos de sexto año nos enseñen Defensa contra las Artes Oscuras. Sin embargo antes de tener esa ultima clase debía asistir a Pociones en las mazmorras

Al terminar la clase, Snape salió casi al instante algo apurado. Los demás reuníamos nuestros libros y demás. Ya solo quedábamos Harry, Hermione, Ron y yo limpiando el pequeño desastre que hicimos durante la clase. Al levantar mi vista observe como Draco se acercaba a nosotros con paso ligero junto a Crabbe y Goyle

- Shine ¿Tienes un minuto? - Dijo el rubio con una sonrisa falsa y orgullosa

- ¿Que quieres Malfoy? - Dijo Harry poniéndose delante de mi

- Tranquilo Potter, vengo en son de paz - JA! Como si supieses el significado de "paz"

- Bien, que sea rápido - Dije con un tono molesto en mi voz

- ¿A que huele esto? - Me acerco una poción a mi nariz, yo dudosa y frunciendo el ceño me acerqué a oler. Un extraño olor al campo de quidditch vino a mi mente, también a leña quemándose en una fogata y al extraño perfume de Cedric

Campo de Quidditch, pasto mojado, madera quemada y... me recuerda a Cedric - Casi al instante el grupo de Malfoy estallo en carcajadas, ¿Qué era esa cosa?

- ¿Por qué se ríen? - Preguntó Ron confundido

Esto, Weasley, es amortentia - Dijo mostrando el pequeño frasco que acababa de oler con aires de superioridad

- Huele a lo que te atrae... - Dijimos con Hermione a la vez en un tono calmado. ¡Carajo! Acabo de confesar no intencionalmente que me gusta Cedric, soy una idiota

Draco salió de la clase entre risas escandalosas y pasos apresurados. Harry, Hermione y Ron se fueron al terminar de limpiar su parte dejándome sola en aquella habitación fría y obscura. Aún que no me queje mucho tiempo ya que minutos después termine y agarre mis cosas para salir. Estaba por irme cuando...

(Minutos antes)

𝐂𝐞𝐝𝐫𝐢𝐜:

Terminé antes mi clase así que decidí ir a buscar a Leila para acompañarla al campo de quidditch. Esta seria nuestra ultima clase juntos lo cual me entristecía levemente, me gusta pasar tiempo con ella. Al llegar a las mazmorras los alumnos de tercero estaban saliendo de la clase sin embargo Leila aún se encontraba allí. Iba a entrar pero escuche una conversación así que me quedé tras la puerta para prestar mas atención

- Bien, que sea rápido - Esa era la voz de Leila, tenia un tono agresivo y cansado

- ¿A que huele esto? - La voz de un niño que no pude reconocer, hubo unos segundos de silencio en donde, yo creo, Leila olió algún objeto

- Campo de Quidditch, pasto mojado, madera quemada y... me recuerda a Cedric - ¿Le recuerda a mi? ¿Campo de Quidditch? Casi al instante unos niños comenzaron a reírse a carcajadas

- ¿Por qué se ríen? - Preguntó otro niño distinto

- Esto, Weasley, es amortentia - Dijo y después rió un poco mas

- Huele a lo que te atrae... - La voz de Leila junto a la de otra niña resonó en mi cabeza. "Huele a lo que te atrae" ¿Eso significa que yo le atraigo? 

Me alejé de la puerta al escuchar unos pasos acercarse y me escondí en el pasillo mas cercano, de allí salieron tres niños. Me acerqué para entrar pero escuche mas pasos y me volví a esconder en el pasillo, de allí salieron Harry Potter y sus dos amigos. Una vez mas, me acerqué y entre despacio, cerré la puerta y la miré, recogía sus cosas nerviosa. Al verme sus cejas se elevaron sorprendida y su boca se abrió levemente. Miré el resto de la habitación, estábamos solos

- ¡Cedric! ¿Qué haces? - Dijo viendo la puerta cerrada, se le notaba el leve sonrojo en sus mejillas y sus dedos jugueteando con los libros nerviosamente

- Vine a buscarte para la ultima clase de Defensa contra las Artes Oscuras - Dije acercándome a ella

- De acuerdo, dejo mis cosas en mi sala común y vamos - Intento avanzar hacia la puerta pero no la deje - ¿Qué pasa, Cedric? 

- Casualmente cuando estaba por entrar escuche una conversación interesante - Sus pupilas se dilataron y sus dedos se inquietaron mas, chocando una y otra vez contra la tapa dura de su libro - Capaz tengas algo que explicarme - Sonreí levemente

Yo no tengo nada que explicar, con permiso - Volvió a intentar irse pero no la deje, necesitaba respuestas porque algo dentro mio me pedía a gritos que la besara

- ¿No sera que capaz te gusto? - Dije deseando que su respuesta sea un si. A pesar de que una parte de mi me inclinaba a besarla otra parte me recordaba lo mucho que me gusta Cho. Mi mente estaba luchando mientras me confundía

- ¿Y-yo? No... ¿Qué d-decís? - Tartamudeaba nerviosa sin embargo no se alejaba de mi lado mientras yo me acercaba lentamente a ella acortando la distancia

- Eres muy linda cuando te pones nerviosa - Dije decidido a besarla. Agarre un mechón de su cabello y jugué tontamente con mi dedo 

- Cedric yo... - Y una vez mas intento irse pero esta vez la agarre de la cintura acercándola a mi, a tal grado que sentía su respiracion chocando contra la mía, su pecho subía y bajaba contra el mio y podía sentir su cálida tela abrazando suavemente la mía. Nuestra miradas chocaron y su cabello tapaba la poca luz de las antorchas a nuestro alrededor. Esos segundos se sintieron eternos sin embargo se alejo unos pocos pasos - Perdóname pero... no puedo - Camino hacia la puerta con la cabeza gacha y se fue dejándome solo con el ruido de mi respiración

𝐒𝐨𝐦𝐞𝐭𝐡𝐢𝐧𝐠 𝐂𝐨𝐧𝐟𝐮𝐬𝐞𝐝¹ │ Cedric DiggoryDonde viven las historias. Descúbrelo ahora