Capitulo 5

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4 Meses, 1 semana y 3 días después.

Tory abrió los ojos, todo seguía oscuro por lo que miró el reloj que alumbraba las 2 am. Era la tercera vez que se levantaba para ir al baño en lo que iba de la noche. Bajó los pies de la cama y tanteo para buscar sus pantuflas. Se levantó torpemente, su barriga se notaba cada vez más y ya le costaba caminar bien.

Durante sus primeras semanas en la casa todo había salido excelente, casi se podía decir que había cambiado de vida. En el desayuno estaba todos juntos, charlaban y luego se despedían para que cada quien fuera a su trabajo. Ella seguía estudiando, y dando sus clases de ballet junto a Corina que se había ofrecido a ayudarla, se habían unido mucho desde que se enteró que la muchacha tenía un hijito, se sorprendió muchísimo porque no tenía cara de ser madre, sin embargo las apariencias engañan. Srta. Jaclovski se había sentido mal al principio, pero luego le insistió en ir a una agencia de modelos, porque según ella, y un articulo del periódico estatal, era una de las bailarinas con más gracia y porte sobre el escenario, sin mencionar su belleza natural, el reportero había ensalzado tanto sus atributos que varias agencias de modelos se había comunicado con la academia de ballet para contactarla, aunque había declinado muchas de las ofertas, y a los más insistentes les había dicho que estaba embarazada y no podía hacer el trabajo, aunque uno de ellos estuvo interesado, incluso quería que le llamase en cuanto se le notase más su estado.

Su madre se había reído a carcajadas cuando leyó el artículo, hasta tubo las agallas de llamarla para decirle que todo aquello era un chiste, al principio se había sentido mal, pero luego se dijo que hablaba el alcohol y no ella. Y más tarde se vio cuestionándose el afecto de su madre hacia ella. El viejo Peter había cumplido su promesa de enviar lejos a Max, aunque él no entendía porque no le quedó más que cumplir los mandatos de su padre. Eliot estaba trabajando en un café cercano, tenía un buen horario, buena paga, y le permitía estudiar, aunque en la noche llegaba muerto del cansancio él le sonreía diciendo que valía la pena.

Tory al salir del baño se dio cuenta de que Eliot estaba parado en el pasillo.

-¿Qué haces despierto?- le dijo ella. Él bostezo y se rasco un ojo.

-Te has levantado tres veces, me preguntaba que te pasaba.

-Estoy bien, las mujeres en mi estado suelen ir al baño muchas veces, lo que por cierto me frustra mucho- él se le acercó y le besó la frente, Tory se estaba acostumbrado peligrosamente a ese gesto. Desde que estaba viviendo en esa casa, Eliot se había mostrado tan cariñoso y atento que le hacía querer recompensarlo con algo, pero aquello que él deseaba no lo podía tener, no por ahora.

-Bien futura mamá, vete a dormir otro rato.

-No puedo, el bebé está despierto y se mueve mucho, quizás me quede en la sala un rato…

-¿Por qué no vienes conmigo?- Ella se quedo callada un momento. Desde aquella vez que se quedaron juntos no había vuelto a compartir habitación, se sentía extraño y aun más después de que la propuesta que le hizo en el hospital. Como no respondió Eliot se reprendió internamente, se recordó que no debía presionarla, pero por desgracia tenia a hacerlo.

-Ok- dijo Tory sorprendiéndolo.

Ella caminó primero hacia la habitación de Eliot y se subió a la cama, no recordaba que fuera tan alta, o por lo menos antes no era tan torpe.

-Ya regreso- le dijo Eliot desde la puerta. Ella asintió y lo vio atravesar el pasillo. Se metió debajo de las sabanas, estaban tibias y las almohadas tenían ese olor característico de Eliot, se descubrió a ella misma acercando la nariz a una de ellas para aspirar el olor. Se dijo que no debería confundirse. Sentía un gran cariño por Eliot, y sí, estaba más que agradecida con él y su familia, pero lo que sentía no era amor, no como amor, amor, sino uno entre hermanos. O eso creía ella. Y no le gustaba hacer suposiciones.

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