[Mi complemento] ~Higuel~ ♥️🇯🇵🇲🇽

Cap.15.1 Pesadilla

Primera actualización 1/2 el capítulo 16 estará disponible después de la publicación del presente.

Aviso: este capítulo contiene escenas que podrían ser no aptas para sensibles. Si puedes y quieres salta este capítulo, pues no afecta realmente a la historia.

— ¡Miguel!

…

…

…

…

— ¡Miguel!

…

…

…

—¡Miguel! ¡A ver a qué horas, chamaco!

Sus ojos se abrieron de golpe, y el olor a canela y flores de cempasúchil llegó a su nariz, inundandola con su dulce aroma. Después de unos minutos en que los marrones ojos se acostumbraron a la luz, finalmente pudo ver con claridad lo que le rodeaba. Era su pueblito natal, Santa Cecilia, estaba en la calle, sentado en una banca por alguna razón que no comprendía, pues él no era del tipo que se sentara a descansar así nada más, pero eso no era lo más extraño. Lo más raro sin duda era el hecho de que no hubiera casi nadie pasando por la calle, excepto algunos niños que se encontraban jugando fútbol o "cascarita" como le decían ellos a media calle, parando su juego cada vez que algún coche o camioneta pasaba por allí.

~¿qué está pasando…?~

De pronto todo se le hizo familiar…
Una sensación a dejavú inundó sus sentidos…
Y de cierta forma tenía un mal presentimiento.

—¡Miguel! Te estamos hablando! Vamos a hacer un tres de cinco ¿le entras?— habló uno de los niños que jugaba deteniéndose a hablarle, tenía entre unos 7 u 8 años. Miguel se señaló a si mismo, como no creyendo que lo hubieran visto allí, sentadote como si nada en la vida estuviera pasando.

—le vas a entrar ¿sí o no?— repitió el niño comenzando a desesperarse, Miguel no respondió, en su lugar se giró para mirar a unos metros de él, donde había un niño sentado en posición fetal en la esquina de una banqueta, los mechones de cabello rojo como el rubí impedían ver su rostro pero de vez en cuando, parecía mirar a su derecha…

— ¿por qué no invitan a jugar a él?— finalmente se decidió a hablar el del lunar, el otro niño se rió mientras sostenía el balón en sus manos.

— de ninguna manera, esos niños son raros, además de que no son de aquí y quien sabe que bichos tengan— el niño fingió un escalofrío y luego soltó una carcajada, Miguel lo miro confundido. "Esos niños son raros". Miguel miró de nuevo al lado para buscar a algún acompañante de ese chiquillo pelirrojo.

~¿raros?…~

Él solo veía un niño…

(…)

No sabe en qué momento, pero terminó por alejarse del grupo de niños que lo miraban decepcionado de no querer jugar con ellos. Ahora estaba a unos pasos del niño pelirrojo de expresión melancólica, acercándose lentamente.

~realmente siento que esto pasó hace mucho…~

—¡hola! Soy Miguel, ¿cómo te llamas?…

Como respuesta recibió un murmullo, pero no venía del niño enfrente de él, venía de otra parte, otra parte que no pudo identificar…

(…)