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Recién habías terminado de preparar el desayuno para los pequeños, eran las las 9 am.
Kita había sugerido desayunar chocolate caliente con pancakes, diciendo que sus hermanos, como él los llamaba, iban a estar bien con eso. Él ya se encontraba sentado en su lugar preparado para desayunar.

-"Buenos días señorita!"

Escuchaste una voz en la puerta del comedor, era un pequeño de tez morena que tenía una sonrisa en los labios, detrás de él se encontraban los 3 menores que aún tenían sus ojos entrecerrados y bostezaban.

-"Señorita? Nana no es una señorita..."

Dijo uno de los pequeños aún con sus ojos cerrados, cuando los abrió su mirada se fijó en ti, se veía sorprendido.

-"Nana se volvió más joven!!"

El mismo niño gritó para luego recibir un suave golpe de quien parecía su gemelo.

-"Atsumu! Ella debe ser la nieta de Nana! Recuerdas? Que dijo que nos iba a cuidar?"

El pequeño de tez morena le comentó al menor con una sonrisa aún en sus labios.

-"Así es! Soy la nieta de Nana" reiste leve por el apodo que le habían puesto a tu abuela "Soy (T/a) (T/n), un placer conocerlos pequeños. Vengan, tomen asiento, vamos a desayunar juntos"

Los 4 pequeños fueron hacia la mesa y cada uno se sentó, dejando como lugar para ti el asiento de la punta de la mesa.
Tomaste asiento y los miraste a cada uno, los menores aún intentaban despertarse, mientras los mayores ya se encontraban desayunando bebiendo su chocolate.

-"Atsumu! No robes mi pancake!"

-"No es de tu propiedad Osamu!"

Los gemelos no tardaron en despertar del todo cuando empezaron a pelear por la comida.
Los mayores solo soltaron un suspiro.

-"Hay suficientes para todos, no deberían pelearse"

Dijiste en un tono sereno mientras los mirabas.

-"Son tontos, se van a pelear igual de todas formas"

El pequeño Suna comentó tranquilo mientras una comiendo y cada tanto bostezaba.
Escuchaste un HEY! de parte de los gemelos. No pudiste evitar reír leve por la pequeña discusión.

El desayuno que tuvieron fue algo ruidoso pero no fue para nada molesto.

-"Siempre se despiertan a estas horas los fines de semana?"

-"Si, los domingos debemos hacer tareas"

-"Le dejan mucha tarea en la escuela?"

-"Esas las hacemos los sábados, los domingos son tareas de limpieza"

¿Tareas de limpieza?

-"Kiiitaaa, de verdad tenemos que hacerlas? Las brujas ya no están aquí"

¿Brujas? ¿Atsumu sé estaba refiriendo a las mujeres que trabajaban aquí?

-"Debemos hacerlas igual, o Nana se va a poner triste"

Aran dijo al pequeño Atsumu que puso un rostro más cansado de solo pensar en tener que limpiar.

-"No tienen que hacerlo, yo estoy aquí para esas cosas, ustedes deberían jugar o hacer algo diferente, no la limpieza"

Soltaste y todos los pequeños te quedaron mirando con un poco de... ¿Confusión?
Se habían quedado en silencio hasta que Atsumu volvió a hablar.

-"Hurra! (T/n) no es una bruja! Es un hada!"

-"De verdad podemos jugar en lugar de hacer limpieza?"

El gemelo menor pregunto aun mirándote.

¿Como demonios los trataban esas mujeres? Realmente parecían ser buenas, ¿Era solo una fachada?

-"Por supuesto!"

-"Podemos ayudarte en algo si lo necesitas"

Aran dijo mientras se levantaba de su asiento para llevar su taza y plato a lavar, ya había acabado de desayunar.

Tanto él como Kita parecían ser muy maduros, y solo tenían un año de diferencia con los otros tres.

Escuchaste el agua del grifo abrirse.

-"Ah! Aran no es necesario que laves!"

-"Gracias! Pero quiero hacerlo! Así no tienes tanto que lavar luego!"

Escuchaste su voz desde la cocina seguido de una pequeña risa de su parte.
No pudiste evitar sonreír, cuando volteaste a ver la mesa los 3 menores ya se habían levantado e ido a la sala.
Juntaste sus tazas y platos para llevarlos a la cocina junto con Kita, que llevaba los suyos.

-"Tu nos tratas muy diferente de esas mujeres"

El pequeño albino dijo con un tono sereno.
Te limitaste a sonreírle y acariciar su cabello.

-"Todos los niños merecen ser felices, haré lo que este a mi alcance para que lo sean, al menos mientras estén aquí"

-"Usted es muy amable señorita (T/n)! Pero si necesita ayuda no dude en contar con nosotros!"

Aran habló y se acercó a ti con una sonrisa, procediste a acariciar su mejilla y sonreirle.
Realmente eran unos ángeles.
Al menos ellos dos.

Escuchaste el sonido de un vidrio romperse y te asustaste.

-"(T/N) ATSUMU ROMPIÓ UNA FOTO"

La voz de Osamu resonó en el lugar.

-"NO ES CIERTO, FUE CULPA DE SUNA"

Cuidando (Inarizaki Niños)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora