El alma gemela.
¿Acaso eso existe? ¿Es real?
Platón dijo: "Aristófanes afirma que los humanos originalmente tenían cuatro brazos, cuatro piernas y una sola cabeza hecha de dos caras. Había tres géneros y cada uno con dos grupos de genitales llamados andróginos. Los hombres eran hijos del sol, las mujeres hijas de la tierra y los andróginos hijos de la luna, hija del sol y la tierra. Los humanos tenían una gran fuerza en ese momento y amenazaron con conquistar a los dioses. Los dioses se enfrentaron entonces con la perspectiva de destruir a los humanos con un rayo; pero entonces perderían los tributos que los humanos les ofrecían. Desarrolló una solución creativa al dividir a los humanos por la mitad como castigo por el orgullo de la humanidad y duplicar el número de humanos que rendirían tributo a los Dioses. Estos humanos divididos se encontraban en una profunda miseria hasta el punto de no comer y perecer, por lo que los había cosido y reconstituido sus cuerpos con el como el único remanente que recordaba su forma original. Entonces, cada humano solo tendría un conjunto de genitales y siempre anhelaría su otra mitad; la otra mitad de su alma. Se dice que cuando los dos se encuentran, hay una comprensión tácita, que se sienten unidos y se acostarían en unidad y no conocerían mayor alegría que eso."
De ahí, el famoso hilo rojo que nos une a nuestra otra mitad. Y es una bella y romántica historia que nos creemos desde niños, que encontraremos el complemento de nuestra alma para vivir el resto de nuestra vida juntos.
Hasta que caemos en la adolescencia, la cual rompe nuestros ideales de encontrar al alma gemela. Al menos la mayoría de los jóvenes lo hacen, y comienzan a creer que no es más que una historia para niños y románticos empedernidos.
Y aunque no era de mis prioridades, para mi era real, si había un hilo rojo invisible atado a mi dedo meñique, el cual conectaba con el dedo de alguien más en el mundo. No sé, quizá un italiano o un español. Solía imaginarlo como el hombre más perfecto, atento y guapo que pudiese existir. Y que nuestro encuentro sería el más romántico de todos. Y no tenía prisa por que llegara a mi vida, era joven y sabía que en algún momento aparecería y seria perfecto.
Aunque cuando llegó no fue precisamente un príncipe azul.
Pónganse cómodos, por que están apunto de escuchar mi alocada historia sobre como yo si encontré a Mi Querida Alma Gemela.
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:) Espero que les guste.
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