PESADILLA | Dabi [Todoroki Touya]

Capítulo 21.

-¿Por qué no salimos y seguimos conversando?

-¿Y perder mi única amenaza contra ti? No creo, señorita heroína.

-Antes de que te arreste, contesta algo, ¿Cómo sabes tanto de mi?

-¿Los héroes son idiotas a los que se les tiene que repetir todo? Ya te he dicho que investigué. -contestó Dabi.

-Los detalles de mi pasado son un secreto, nadie lo sabe. Ni siquiera mi más cercano amigo sabe los detalles.

-Bueno, digamos que tengo mis métodos.

-Eres un idiota, villano. Cada vez me acerco más a la verdad sobre ti.

-No lo creo, tu reacción sería muy diferente con cada paso que das cerca.

-Tu me conoces, pero yo no a ti, ¿o si? Dime, Dabi, ¿Quién te habló de mi?

-¿Sabes? He visto tus ojos antes y son hermosos. Es una pena el no poder verlos ahora sin que causes una escena. -cambió de tema el azabache.

-¿Ligando con una heroína? Tienes mucha confianza, ¿no crees? -comentó ella dándole un trago a su bebida, la cual ya se había apagado.

-Puede ser, una chica me la dio.

-Ah, por Dios. Cállate antes de que te destruya. -ordenó la pro-héroe. -¿Sabes? Ya charlamos lo suficiente, te tengo que arrestar.

-Antes de arrestarme, ¿Cómo me ves?

-¿A qué te refieres exactamente? -preguntó Aku sin entender.

-¿Soy tú tipo?

-Sí, lo eres, una pena que seas un villano.

-Bueno eso me da esperanzas, así que no puedo ir contigo. Hasta luego.

Dabi se paró de la barra luego de darle un pequeño trago a la bebida de la chica y caminó hasta salir del bar, sin embargo ella aún lo tomaba de la muñeca.

-¿A dónde crees que vas, villano?

-Planeaba retirarme sin hacer un escándalo, pero creo que no voy a poder.

Aku tomó a el chico y le hizo una llave, colocando su brazo detrás de si mismo y haciendo presión mientras sacaba una navaja de debajo de su blusa y colocandola en el cuello de su contrario.

-Moriría por ver donde estaba eso. -confesó él.

-Es una lástima que no pueda matarte, supongo que nunca sabrás donde estaba.

-Entonces no tengo nada que hacer aquí, nos vemos. -se despidió Dabi.

De la nada humo comenzó a salir de su manga, cosa que nubló la vista de la chica. En ello una luz azul se vio, dando a conocer que él estaba usando su quirk. Antes de que ella lo golpeara, Dabi usó su quirk contra ella y la quemó en el abdomen levemente.

Akumu, quien se hincó en el suelo por el repentino dolor, miró a su alrededor y notó su soledad, aquel villano había escapado y ella terminó herida. Se reincorporó con un poco de dolor y con la blusa levemente quemada entró al bar, donde se sentó en la barra una vez más, pidiendo un vaso de agua para limpiar la herida.

Al terminar de desinfectar el área quemada, tomó de su bebida hasta terminarla y pagó, para posteriormente volver a casa aún más molesta e intrigada.

Al llegar y abrir la puerta, una nota yacía en el suelo como si la hubieran deslizado por el pequeño orificio de abajo. Tomó el pedazo de papel y lo leyó atentamente, éste decía: "Un placer charlar contigo. Lamento aquella quemadura, pero bueno, no es la primera vez ¿o si? En fin, no es mi última visita, tengo que ver tus ojos sin un desastre por consiguiente. Tenlo presente".

Al terminar de leer dejó la nota en la mesa de la entrada y caminó hasta el sillón, donde se echó exhausta. Tomó su teléfono y revisó el vídeo que Mic le envió, mirando con una sonrisa como Shoto hacía su prueba con aquellos niños problemáticos. A los segundos de terminar de ver la prueba, un mensaje de parte del menor de los Todoroki le llegó, informándole en una corta oración que pasó. La heroína sonrió feliz y le respondió felicitándolo para luego dejar su teléfono y comenzar a vendar su herida como era debido.

-Touya... ¿Quién mierda es Dabi? -preguntó a la nada. -No me digas que...