Loved

Capítulo 2

Ian y Lucy se besan como si el mundo se fuese a acabar, solo se separaban para poder respirar, sus besos son una mezcla perfecta entre deseo y romanticismo. Después de unos minutos besándose Ian comenzó a desabotonar la blusa que llevaba puesta Lucy y al mismo tiempo ella intentaba quitar la camiseta de él.

Ian: ¿Quieres que sub...?

Dijo él con la respiración entrecortada pero ella lo interrumpió.

Lucy: No... Yo solo... En cualquier parte que no hayas...

Dijo ella entre besos con su voz claramente agitada.

Ian: Entiendo.

Esta vez fue él quien interrumpió porque sabía a qué se refería, y volvió a besarla. Consumidos en la intensidad del momento hicieron el amor en varias partes de la sala de estar y la cocina. El fuego entre ellos parecía no poder terminar de consumirse. Después de un par de horas, Lucy comenzó a vestirse rápidamente mientras Ian la miraba un tanto fascinado y otro tanto decepcionado, él no quería que ella se fuera. Ian se puso su ropa interior y caminó hacia la puerta siguiendo a Lucy, quien no le había dirigido la palabra desde su último asalto de pasión.

Lucy: Adiós Ian.

Dijo ella mientras miraba fijamente a sus ojos y luego se dio vuelta para abrir la puerta. En ese momento Ian tomó su mano y giró a Lucy hacia él, se miraron fijamente un par de segundos antes de que Ian la besara, cuando se separaron Lucy tocó el rostro de Ian y arregló su cabello.

Ian: ¿Te das cuenta que esto se parece a...?

Ian estaba haciendo alusión a una escena Ezria, cuando Lucy lo interrumpió.

Lucy: Lo sé, pero esto es la vida real y este es un verdadero adiós.

Ian: No es así, ya sabes que nos veremos en una semana para las grabaciones, ¿No?

Lucy: Tú sabes a lo que me refiero, hicimos un nuevo trato, adiós.

Lucy se dio vuelta nuevamente y salió de la casa de Ian, ella se subió en su auto y comenzó a manejar hacia su departamento, mientras al mismo tiempo Ian cerró rápidamente la puerta porque no soportaba la idea de verla partir, luego se sentó en su sofá y simplemente no podía dejar de repasar en su mente cada momento de todo lo que habían hecho en ese día, él no podía creerlo, y en su rostro permanecía una sonrisa gigante.

Después de 5 minutos, Ian escuchó que alguien golpeaba su puerta y su corazón no pudo evitar dar un salto esperanzado con la idea de que Lucy había vuelto. Se levantó rápidamente para abrir la puerta y cuando abrió, su sonrisa desapareció, era Samanta, que había llegado sin avisar.

Samanta: ¡Sorpresa!

Ella tenía una gran sonrisa y entró en la casa sin que Ian pronunciara ninguna palabra, él estaba estático en su lugar, no esperaba que su novia llegara y mucho menos en ese momento. Después de varios segundos en los que Ian no decía nada y miraba hacia un punto determinado pero sin ver realmente, Samanta frunció el ceño y decidió hablar.