Yo Decido Cuando Irme| HYUNLIX

002.

Por las rendijas de los estantes de la biblioteca observo en absoluto secreto a el bibliotecario, es callado y solo se mantiene leyendo esa fila de libros que conserva a un lado de la caja registradora aunque, siendo sinceros la gente rara vez visita este lugar.

Y eso me hace sentir algo de molestia, deberían saber que aquí hay otro mundo, lleno de letras e historias fantásticas. Quizás si apreciarán más la lectura, sabrían que pasar el tiempo leyendo no es tan malo.

—Oye pecas.

El libro se me resbala de las manos cuando la voz del bibliotecario resuena en mis oídos. —No te asustes pequeño, solo me preguntaba si tus padres no te dicen nada por estar toda la tarde aquí.

—Mis padres viven en la ciudad, solo estoy aquí con mi tía— respondo aclarando mi garganta.

Él desliza sus dedos por la pasta de varios libros. —Oh, ya veo. Al menos te tengo como cliente, no es tan malo.

—¿Que significa eso?— arqueó las cejas ofendido y observo el reloj de mi mano. —Usted...¿Vive solo aquí?

El juega con el brillante anillo y justo en ese momento su celular comienza sonar así que se va sin responder a mi pregunta, suspiro profundo recogiendo mi mochila y me marcho; de cierta manera saber sobre está persona ha despertado mi interés, venir repentinamente a este pueblo a rentar sus demasiados libros, sin compañía porque nadie lo había con nadie ni tampoco conoce a nadie de este lugar y además, ese anillo.

¿Estará casado?, ¿O divorciado quizás? Pero, ¿Porqué usar un anillo cuando ya no estás con esa persona?

—¡Buenos días!— Seungmin me aborda colgándose de mi espalda y casi nos caemos juntos. —¿Que te pasa, chico débil?— se burla.

Le doy un golpe en el brazo siguiendo caminando pero en el camino me detengo abruptamente cuando veo en la dirección al bibliotecario Hwang hablando con el director y otro chico chico de cabellos negros.

—Oh, mira, el nuevo vecino— murmura mi amigo y absorto los observo pero cuando la campana suena, corremos a nuestras aulas.

Verdaderamente, Hwang Hyunjin me da demasiada curiosidad y no se porque presiento que está curiosidad es absolutamente mala.