❍ ѕólo 1 cápιтυlo
❍eѕ para el concυrѕo de la crew ιdol, por lo qυe cυando тerмιne вorraré eѕтo
❍хdon por erroreѕ de redaccιón, eѕ мι prιмera vez eѕcrιвιendo
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Caminaba por los pasillos del hospital con algo de miedo, ¿la razón? Mi mamá estaba hospitalizada por un accidente de tránsito, así que estaba intentando buscar la habitación "45".
Cuando por fin la encontré, el médico examinaba a mi madre quien estaba con los ojos cerrados y un vendaje que cubría su cabeza. El médico se dió cuenta de mi presencia, miró por última vez a mi mamá para caminar hasta la puerta en dónde yo estaba.
── ¿Eres algún familiar? ──preguntó mientras anotaba en un papel algo que no alcanzé a leer.
── Sí. Soy su hija. ──sonreí un poco mientras miraba por una esquína a mi madre sin que lo notara.
── Bien, entonces necesito que firme esto. La paciente se encuentra fuera de riesgo, pero de igual forma está grave, así que por ahora no se permiten visitas. ──explicó mientras me entregaba aquel papel en el que escribió.
── Oh, está bien. ──sonreí cómo pude mientras el médico se dirigía a otra sala.
Suspiré cerrando los ojos por un segundo e intenté buscar a alguna enfermera, pero al parecer no había ninguna cerca. Me senté en la silla azul que estaba al frente de la habitación en la que estaba mi mamá y cerré los ojos intentando dormir.
¿Me tendría que sentir mal? Ese es el sentimiento que muchas personas sentirían si su mamá estuviera en esta situación, pero yo no siento eso. Si alguien me preguntara el por qué, no sabría que responderle, porque la verdad es que yo tampoco lo sé, quizás era por que apenas la veía, durante toda mi infancia ella no estuvo, pero tampoco le tengo rencor. Estaba tan perdida en mis pensamientos que olvidé dejar cerrado el auto, así que corrí cómo si fuera el fin del mundo, y accidentalmente dejé mi teléfono en la silla, y me tuve que devolver para buscarlo. Casi no veía debido a la distancia, pero estaba segura de que una personas estaba con un teléfono en la misma silla en dónde yo dejé el mio. Caminé hacía la chica y toqué su hombro.
── ¡Hey! ¿Ese no es mi teléfono? ──pregunté algo alterada, ¿es normal que una chica tenga mi teléfono en sus manos y su mochila abierta? Para mi no.
La chica al principio me miró asustada pero después me sonrió, si apostara diría que es el ser humano más tierno que he visto.
── Yo no intentaba robartelo, sólo quería entregarlo para que encuentren a quien lo dejó. ──miró hacía otro lado con sus labios en forma de línea ── ¡Soy Jiwoo! ¿Y tú? ──sonrió de nuevo y me estrechó la mano.
── Me llamo minjoo, jeon minjoo. ──completé la frase y me entregó mi teléfono, tenía prisa, quizás en este instante mi auto puede estar al otro lado del mundo.
