Remus Lupin ♥️

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I'm in love

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I'm in love

Estar enamorado, así estaba y se sentía cuando la Remus miraba a ____, ni el mismo sabía explicar como se sentía cuando la miraba, simplemente se quedaba sin palabras.

Estaba tan enamorado que podría hablar durante horas sobre su amor con quien sea, familiar, amigo y hasta desconocido aunque ese no mostrase interés alguno.

Estaba tan enamorado que pensaba que los defectos de su enamorada eran más que perfectos y que podía cuidarla, protegerla y ayudarla.

Estaba tan enamorado que podía pasar la noche en vela pensando en ella, pensando en su rostro, pensando en su voz, pensando en que él la cuidaría a ella si tuviera una pesadilla.

____ era ella, el amor de su vida. La luna brillante y las estrellas de su cielo al mismo tiempo, ella era su más grande amor, la que le robaba el aliento y el sueño.

Ella brillaba con mucha intensidad tanto como exterior como interiormente, era luz y paz para él, amaba verla sonreír al mostrar sus dientes pues sabía muy bien que cuando sonreía así era porque esa sonrisa era real y el amaba provocarle sonrisas.

Remus había estado enamorado de ella por mucho tiempo, pero al inicio era demasiado tímido para verlo y aceptarlo.

Cada vez que ella se acercaba Remus respiraba con dificultad, trataba de esconderse detrás de alguno de sus amigos, amaba verla hablar, amaba escuchar su voz y cuando ella se dirigía a él, simplemente trataba de no verse nervioso.

Tantos días y meses de sufrimiento y no porque ella lo ignorara, sino porque cada mínimo detalle sobre esa adorable y hermosa criatura lo volvía realmente loco a niveles que pocos podrían imaginarse.

Remus podía encontrar un hogar en ella, lo hacía sentir cómodo, seguro, tranquilo y muy feliz, ella era la que lograba que Remus saliera y no se la pasara solo leyendo libros o estudiando, si ella iba Remus era el primero en decir que también iría, tan solo para verla de lejos o tener la oportunidad de hablarle.

Ella simplemente era hermosa, graciosa, divertida, inteligente, amable, pura, Remus nunca acabaría de describirla, era todo para él.
Ella tenía el poder de acelerar y calmar el corazón de Remus, de hacerlo reír, llorar y hacerlo sentir amado.

Remus se sentía ebrio, ebrio por ella y su dulzura, ebrio de amor puro y verdadero.

Quería abrazarla y amarla por horas, días y años. Quería decepcionarse y volver a casa, encontrarla a ella y echarse a llorar como un niño en sus brazos. Quería que ella sacase sus lágrimas y quería que lo tranquilice con bellos y amorosos besos en sus labios. Quería poder prepararle el desayuno todas las mañanas, bailar con ella por todos los rincones de la casa, ayudarla a peinarse el cabello, ayudarla a elegir algún vestido que ella quisiera, enseñarle muchas cosas, viajar con ella, la quería a ella simplemente.

Quería besarla de pies a cabeza, quería devorarla con la mirada para que nunca perder ese recuerdo. Quería escucharla decir alguna tontería porque eso amaba, escucharla, quería poner sus manos en su cintura y darle un beso en los labios diciéndole que todo estaría bien, quería robarle el aliento como ella se los hacía a él.

¿Ella era la indicada? Por favor, ella se encontraba muchos puestos arriba de ser "la indicada" para Remus.

Remus era un simple humano, un humano ordinario...pero junto a ella, se sentía poderoso y muy afortunado, se sentía especial y lleno de amor. Remus amaba presumirla ante todos, decir que se la llevaría, decir que la amaría por siempre

" Por favor, nunca me abandones" pensaba el constantemente.

Remus estaba seguro de algo, estaba seguro de que siempre la amaría.
Que siempre estaría para ella en las buenas y en las malas, en la salud y en la enfermedad, estaría con ella aún así cuando ella quiere estar sola, respetaría su espacio pero él le dejaría en claro que siempre estaría para ella cuando esté lista.
Eso lo había prometido en altar, prometió estar con ella para siempre y así sería, Remus estaba seguro de eso.

—Amor, tus amigos acaban de llegar, ¿porqué estás aquí solo?

Ella apareció con un vestido blanco y largo que le quedaba a la perfección, Remus se miró al espejo, llevaba un traje negro, le sonrió y se dio la vuelta para mirarla

—Estaba pensando en cosas

—¿Qué cosas, amor?

—En lo mucho que te amo y jamás entenderías con cuánta fuerza lo hago

—¡Remus!— la mejillas de la chica se pusieron Rojas

—Es la verdad amor, te amo y siempre te amaré por el resto de mi vida.

Sonreíste y el depósito un suave beso en tus labios

—¿Te he dicho lo hermosa que te ves con ese vestido de novia? Tu novio es afortunado

—Mejor dicho mi esposo

—¿Esposo? Wow, sin duda es afortunado

—Jajaja vamos esposo mío, la gente está esperando afuera

—Bueno nada más porque mi esposa hermosa me lo pide

Remus tomó tu mano y juntos salieron a la fiesta de su boda, Remus con una sonrisa boba que solo tu podías causarle.




















Ay pero que cursi 🤮
JAJAJAJAJA
Espero les haya gustado, déjenme en los comentarios si fue así
Las amo y cuídense por favor.

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