XVI - Juego del destino Parte I

Comenzar desde el principio
                                    

-Sr. Sappheiros...

-Que inesperada sorpresa, nos volvemos a encontrar pequeña señorita, parece que se te cayeron estos frutos, tómalos -dice extendiendo sus manos hacia ella para entregar lo que sostienen.

-Gracias... -ella recibe los frutos sin mayor alarme.

-Pensé que durarías más en acercarte, ¿no me temes?

-¿Por qué debería? no me has hecho nada malo.

-Bueno, nuestro primer encuentro no fue precisamente agradable y tu amigo parecía desconfiar bastante.

-Oh, en ese entonces estábamos rodeados, no sabíamos qué pasaba.

-No deberías estar sola, resaltas más de lo que crees, no pareces ser de por aquí.

-Usted tampoco...

-Cierto... ¿y tu amigo no te acompaña hoy?

-Volverá pronto -dice algo incomoda.

-Eso explica porque llevas tantas cosas, ya me parecía extraño que sola pudieras llevar todo eso contigo -después de un breve silencio- parece que te he incomodado más de la cuenta, si me disculpas, me iré...

-Espere... por favor solo un momento... -le pide mientras busca rápidamente dentro de unas bolsas de tela. Pronto encuentra unos dulces que compró antes y se los ofrece a Sappheiros-. Por favor acepte esto como disculpa y agradecimiento.

-¿Me entregas esto? -pregunta algo extrañado.

-No tengo dinero conmigo, lo lamento...

-Ja, ja, no estoy pidiendo una retribución...

-Lo se, solo queria... ¿como está Lea? -suelta la pregunta de forma inesperada.

-Si preguntas por ella así, quiere decir que ¿Fuiste tú quien la salvó...?

-No yo... fue mi amigo quien...

-Ella está bien -interrumpe-, sabes, deseaba dar las gracias a quien le ayudó, parece que soy quien les debe algo ahora.

-No por favor, solo quería asegurarme de que ella haya llegado a salvo.

-Eres una señorita muy extraña, aun cubierto mi rostro suele llamar la atención en una forma negativa, pero tu no pareces estar afectada.

-También considero extraño lo tranquila que me siento, su aspecto en realidad no me importa, es solo que hay algo familiar en usted... -ella lo mira fijamente-, pero a la vez su mirada es muy intensa, puedo sentir mucho dolor y soledad en ella.

Sappheiros se percata del brillo en los ojos de Iris, por instantes se sorprende, pero sus dudas se disipan.

-Je, muchos adultos tenemos este tipo de mirada, la vida no es tan sencilla.

-¡Oh! qué grosería de mi parte, disculpeme por favor, no quise...

-No te preocupes -interrumpe-, ya debo irme, solo déjame darte un consejo, no confies en los extraños -dice posando una mano en el hombro de la joven y acercándose a su oído- gracias -susurra al final y se incorpora.

-¡Iris! -grita a lo lejos Ángel mientras se acerca corriendo.

Ella levanta la mano para indicar que le ha escuchado e intenta regresar su atención hacia Sappheiros para despedirse, pero cuando voltea este ya había desaparecido, busca con la mirada alrededor pero no hay rastro del hombre.

-¿Qué pasa, estás bien? -pregunta su amigo al llegar a su lado.

-Si... solo se me cayeron unos frutos y estaba revisando que haya recogido todos... ¿pudiste encargarte de lo que necesitabas?

-Oh, me tomó más de lo esperado, lamento hacerte esperar.

-No te preocupes, comamos.

-Ya debemos ir a verificar lo del mensaje de mi amigo Vir, ¿te parece si los comemos en casa?

-Por mi está bien.

Ambos jóvenes se retiran mientras a lo lejos son observados por Sappheiros y la joven que le acompaña.

-¿En serio la dejarás ir?

-Ellos salvaron a un integrante de mi familia, aunque no me lo dijeras tenía una leve sospecha y ella me lo acaba de confirmar.

-Ugh...

-Esta será la forma en que demuestro mi gratitud, la próxima vez que los veamos, todo será diferente. Regresemos, debemos preparar todo, pronto ejecutaremos el plan.

-¿Eh? ¿tan pronto?

-Ya no hay nada que esperar, esa niña es lo que necesitamos para concretarlo.

El único ojo de Sappheiros brilla, una leve sonrisa pero bastante tétrica se dibuja en su rostro, la joven solo lo observa confundida. Pronto se retiran del lugar.

 Pronto se retiran del lugar

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
AngelineDonde viven las historias. Descúbrelo ahora