Mujeriego... ¿En apuros? [Ziall]

I

"Si fallaste ayer, no importa. Hoy tienes la oportunidad de comenzar de nuevo."

¿Sabéis de esos momentos, en los que sabes que tienes que hacer algo, pero simplemente, no lo haces? Era uno de esos momentos.

Y Zayn era la persona que estaba sufriendo las consecuencias de esos momentos.

-Deberías mover el culo, y buscar una solución rápida amigo. - Louis se llevó el vaso de alcohol a la boca, y le dio un par de tragos.

-¿Una solución? No quiero una mierda de solución, quiero una persona que este completamente enamorada de mí ahora mismo.

-Estúpido, esa es una solución.

Zayn miró a Louis cansado, y frustrado de aquélla sitúacion en la que se encontraba.

-¿Crees que podría pagar a una persona unas cuantas semanas? Y ya sabes, luego despedirla. - planteó el morocho mientras levantaba la mano en dirección al camarero por tercera vez.

-Podría ser una buena idea, pero me parece que nadie en su sano juicio, aguantaría una semana contigo. - se cachondeo Louis.

Si, Louis Tomilson, dueño de una gran empresa que se dedica principalmente a estafar a pequeños negocios. Amigo de Zayn desde hace diecisiete años, y compañero de barra durante uno. Gran persona.

-Ninguna chica de éste bar aceptaría la oferta. - Zayn se revolvió el pelo, y volvió a llamar la atención de el camarero.

-Ése es tu problema. Si no te las hubieses cepillado a todas, ahora tendrías mas posibilidades de salvarte el culo.

Zayn miró enfurruñado a Louis mientras frunciá los labios. El castaño tenía razon.

-Desde que perdí la virginidad con una puta, me ha dado igual acostarme con unas cuantas más.

Louis negó con la cabeza. Era increíble como alguien podía cambiar tanto en apenas dos años.

-Bonita forma de ver las cosas.-respondío.

Desesperado por tomar un trago, Zayn gritó a aquél chico al que llevaba llamando desde que había entrado en el local.

-¡Chaval! ¡Quieres hacer bien tu trabajo y traerme aquí un trago!

La gente de el bar se giro curiosa ante el griterío.

-Por dios Zayn, ¿No ves que es su primer día? - habló Louis mirando a el chico agachado en el suelo, recogiendo unos cuantos platos rortos.

-Mucho le va a durar este puesto. - respondío secamente.

El chico, anteriormente agachado en el suelo, corrió detras de la barra, y puso los trozos rotos encima de ella, seguidamente se acerco a ellos.

Torpemente cogió un bolígrafo, y una libreta.

-No hombre no, que no voy a comer nada. -habló Zayn molesto sin levantar la mirada de las manos de el chico. -Ponme algo fuerte y haz el favor de largarte.

Dicho esto, levantó la mirada, y se quedó sorprendído ante lo que vio.

-Veras... Losiento mucho, señor pero... - habló el chico temeroso y con la mirada agachada.

A Zayn se le había olvidado completamente lo que quería en aquel momento. Se había quedado atrapado en aquellos ojos azules que le habían recordado tantas cosas en muy pocos segundos. Lo único que fue capaz de pensar fue en el mar.

En la tranquilidad de las olas chocando con las rocas, y la calidez de el sol sobre su piel. El olor a sal en sus fosas nasales, y la arena acariciandole los pies suavemente.