Bad decisions! ➖Outer Banks

O17!¡

Jamás oí de esa calle. Esto pinta mal.

—Nunca oí de Resurrección Drive—comentó Sarah.

—Yo tampoco—dije.

—Es porque son ricas—mencionó JJ. Rodé los ojos.

Desvié mi mirada hacia la ventana, miré el espejo, fruncí el ceño. ¿La policía?

—Sólo porque sea maleza no significa-- —fue interrumpido por el sonido de una sirena. Kiara dijo algo, pero no oí, giré mi cabeza y miré hacia atrás—. ¿Están jodiendo?

—¿Por qué nos paran?—cuestioné.

Me crucé de brazos mirando al frente pensado que podríamos hacer. Negué con la cabeza al recordar la hierba, me giré.

—Ponla hierba bajo en asiento—ordené.

El sonido de un arma sacándole el seguro hizo que me bloqueara. No puedo moverme.

Miré a John B, negué con la cabeza mientras mis ojos se nublan.

—¿Por qué no voy a ver que tengas las manos arriba?—cuestionó el supuesto desconocido, le apuntó a John—. ¡Las manos arriba!—gritó—, ¡todos!—volvió a gritar al ver que no le hacia caso, alcé mis manos temblorosas—. ¡Ustedes fuera!

Nos señaló, abrió mi puerta, me bajé.

—¡Salgan del auto! ¡Rápido! ¡Déjalos salir!—tocó mi brazo con su arma, cerré los ojos y asentí, me acerqué a la puerta y la abrí—. ¡Vamos! ¡Salgan del maldito auto!

Me quedé unos segundos en blanco sin saber que hacer, vi que volvió a apuntar a unos de mis amigos, me acerqué a él con mucha seguridad fingida.

—Vamos, Barry, nos conocemos. Mi papá fue con los tuyos a la secundaria, sabes quién soy, no quieres ese pedazo insípido de oro—dije mientras negaba, traté de no mirar el arma—, los dejas ir y te daré mucho más de lo que vale eso.

Vaciló, me creyó, sonreí. John B lo golpeó por detrás y comenzaron a pelear, agarré el arma rápidamente, JJ y los demás se acercaron.

Suspiré.

Rápidamente me posicioné frente a ellos, golpeé a Barry, sabía con certeza que era él a pesar del pañuelo que tenía. Cayó al suelo y Sarah comenzó a golpearlo con la puerta de la camioneta varias veces.

Lo apunté con el arma, le quité el seguro y apoyé el cañón en su frente.
John B le quitó el pañuelo.

—Seguro conoce a mi hermano—comentó Sarah con disgusto.

—Y le vende coca a mi papá—siguió JJ.

—Escuchen, podría haberlos lastimado a--

JJ le dio una patada interrumpiendo su monologo.

—Amigo, tranquilo—murmuró John B. El rubio metió su mano en un bolsillo de los pantalones de Barry, sacó su billetera.

—Vámonos de aquí—dijo Pope, pero los chicos miraron la identificación.

Me acerqué para verla también, sin apartar el arma de su coronilla.

—Tenemos una última parada—dijo JJ aproximándose a la van.

—Ey—se quejó John B al momento que el rubio lo empujó.

—Veamos donde vive el hijo de perra—habló el Maybank pasando por al lado de las chicas.

Cerré los ojos con fuerza al oír los gritos de Barry. Siento lastima por él. Suspiré y me subí a la camioneta.

—¡Vamos!—gritó Pope. John B. tiró las llaves del chico hacia unos arbustos, rodé los ojos, vamos. Eso era innecesario.