Capitulo 2

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CAPITULO 2

Papa entro por la puerta, dejando en el aire mis esperanzas de armarme de valor y decirle, palabra alguna a cerca de mis planes a futuro lucia  cansado, como de costumbre, sin embargo, siempre con una sonrisa en su cara, una sonrisa que pocas veces llegaba a sus ojos.

Me dolía verlo de esa forma, pero todos habíamos intentado dejar atrás el pasado, de alguna forma, el no puede, la culpa lo carcome, una culpa que no debería cargar, una culpa que la debería cargar yo, todo lo que paso ese día, fue mi culpa, de nadie más, y a pesar de eso, yo seguí con mi vida, o al menos eso intento aparentar.

 En esta familia todos somos unos aparentadores.

-Hola cariño ¿Cómo te fue en funeral? – Se quitaba la corbata mientras se dirigía a la habitación que compartía con mi madre, no estaba segura de que contestar, ya que sabia que mama le quería contar la primicia de los dos amantes y una mujer difunta, así que opte por lo más fácil.

-Bien. - Sabía que él podía escucharme a través de las paredes, no tenia que alzar mucho la voz- Mama se quedó, yo tuve que venir antes porque tenia la idea de que comiéramos todos en familia y quería organizar todo.

No dijo nada, no tenia porque, las cenas eran comunes entre nosotros, todavía lo eran, pero no con la misma regularidad de antes.

Salió del cuarto, ya con ropa mas cómoda puesta, estaba por sentarse al lado mío, supuse que quería ver televisión antes que viniera mama, pero en el momento que agarraba el control de la televisión, se escucho la puerta del garaje abrirse, minutos después mama, entro por la puerta principal, con una expresión indescifrable, propia de mi madre.

Ella era hermosa, tenia un tono de piel que variaba entre lo bronceado y lo dorado, su cabello era castaño claro, sus rizos se miraban tan preciosos, tenia los ojos mas hermosos que alguien pudiera envidiar, eran verdes, era un verde que te recordaba aquellas vacaciones que pasaste en el lago de tu familia, todo en ella gritaba hermosura.

Se escucho el timbre, dándome a entender la llegada de la comida, pedida previamente.

Mi padre me dio un billete de 20, automáticamente, pero lo rechacé con cortesía, el ya acostumbrado a esto, solo levanto una ceja y recibió a mi madre con un abrazo.

Sali al patio delantero para abrir el portón, estaba por decir buenas noches, y levante mi rostro para regalarle una sonrisa.

Pero el que me devolvió la mirada no era alguien del restaurante de comida china, era ni mas ni menos el chico que había visto deprimido cerca de la casa de la tía.

Lo mire extrañada, porque no decía nada, ¿Qué carajos estaba haciendo acá? El no parecía tener intención de hablar así que lo hice yo.

- ¿Quién eres y qué haces aquí? - Mi voz sonó mas dura de lo que quería, así que intenté suavizar mi rostro, pero no pude, desde que lo vi, tuve esa sensación extraña, esa que te dice que te mantengas alerta.

Con una sonrisa ladeada me miro y dijo:

- Tu debes ser Olivia ¿No? 

El Diario Secreto de OliviaWhere stories live. Discover now