— ¿Quieres ir a comer? —cuestionó el alto mirando la hora en su reloj de muñeca —Pronto será mi hora de comer, podemos ir a un restaurante cerca. 

—En realidad, lo que tengo que decirte es importante y… no creo que sea conveniente hablarlo en un lugar público. Creo que tu oficina… es más privada para ello. 

—De verdad no comprendo esto. Vienes hasta acá buscándome urgentemente. Y de acuerdo a mi asistente, eres un empleado de-..

—Bueno, tuve que mentir un poco acerca de ello para poder verte. Ahora no es fácil poder encontrarse contigo, eres un hombre ocupado. —Chanyeol soltó una risa ácida que Baekhyun no comprendió y presionó uno de los botones de su teléfono de escritorio para pedirle a su secretaria traerles café a ambos. 

—Por favor, vuelve a tomar asiento. —Pidió con un ademán de mano. Baekhyun carraspeó y volvió a sentarse en el sofá, sintiéndose incómodo y nervioso. 

La actitud de Chanyeol era muy distinta a aquella noche. Actuaba indiferente y serio. Parecía no estar contento con su presencia ahí, ¿acaso estaba molesto con él? Baekhyun no sabía exactamente si era así y tampoco lo culpaba, pero Chanyeol sólo lo ponía más ansioso con esa actitud. 

La secretaria no tardó en entrar a la oficina con dos tazas de café en una charola. Las colocó sobre la mesita cafetería frente al sofá y Chanyeol tomó asiento a su lado a una distancia prudente. Baekhyun lo estudió un poco y puede que sí estuviera enojado y comprendía por qué, después de todo él lo había abandonado en una habitación de un motel tan pronto como despertó la mañana siguiente luego del sexo. Pero para su defensa, había surgido algo urgente. 

— ¿Entonces? ¿A qué se debe tanto misterio y tu visita en mi lugar de trabajo? 

Baekhyun no sabía cómo comenzar. Lo que le iba a decir era una noticia fuerte, así que él estuvo practicando días atrás como tocar el delicado tema sin provocar algún ataque en el corazón al otro. Pero ahora que estaba ahí, las palabras parecían hundirse en arenas movedizas al final de su boca. Simplemente nada salía. 

Con manos temblorosas tomó su taza y le dio un sorbo para mojar su boca. Espera… ¿el café era apto para su estado? Apenas se había hecho la prueba unos días atrás, todavía no tenía una cita con el obstetra. ¿Qué pasaba si no podía seguir bebiendo café? Aunque estuvo evitando ingerirlo por la gastritis que pensaba que tenía, él realmente amaba el café. ¿No podría tomarlo los siguientes meses?

— ¿Baekhyun? —Chanyeol lo sacó de sus pensamientos. El más bajo levantó la vista en su dirección y volvió a carraspear. —No sé lo que sucede, pero estás actuando extraño. 

Baekhyun quiso decir que quien actuaba diferente a esa noche era él, pero tampoco quería desviarse del tema principal. Chanyeol se llevó la taza con café a la boca, de una manera sofisticada, de una manera bonita que en otras circunstancias Baekhyun se hubiera detenido a apreciar más del tiempo necesario. Y no podían culparlo, el elegante porte del hombre, sus rasgos varoniles y buen cutis acentuaban su atractivo. Maldición, se estaba desviando una vez más del tema principal. Chanyeol le dio otro sorbo a su café mirando hacia el frente y cuando estuvo  cerca de darle otro sorbo...

—Estoy embarazado. —Chanyeol detuvo su tarea y lo miró de reojo frunciendo visiblemente el ceño. 

Chanyeol no quería admitir que en realidad la noticia no podía serle indiferente porque era decepcionante saber el estado del chico en ese reencuentro. Pero… ¿Por qué tenía que venir a decirle eso a él? 

Asintió sin mucho preámbulo y continuó con su sorbo. 

—Estoy esperando a tu hijo —El menor escupió el café y comenzó a toser frenéticamente en un intento de volver a respirar. 

¡Tu hijo n̶o̶ es mío! 《ChanBaek》Donde viven las historias. Descúbrelo ahora