5. Días soleados

Börja om från början
                                    

—No estoy enamorado de alguien. ¿Me vas a presentar a alguna mujer? —dice a modo de broma.

Por supuesto no está interesado en ninguna mujer, aunque se ha ganado uno que otro halago, además de regalos que llevan sus estudiantes de parte de alguna madre soltera. Yixing los acepta, ya que Junmyeon le dice que es mal visto si no lo hace, así que al llegar a casa los comparte con los demás habitantes, incluyendo al amigo entrometido de Kyungsoo, quien se la pasa más en esa casa que en la propia.

—¡No quiero eso! —reacciona el niño haciendo una mueca como si hubiese probado algo ácido.

Yixing sigue riendo contrario a Junmyeon que parece algo molesto, tomando su sopa sin inmiscuirse.

—Tranquilo, solo bromeaba —agrega alegremente—. No estoy interesado en ninguna mujer. —Le aclara. Su respuesta parece aliviar al menor.

—Qué bueno porque mi papá y tú ya son como esposos —asegura el mocoso.

Yixing queda con la cuchara en la mano y la boca abierta como un tonto. Junmyeon, por otro lado, se atraganta con su sopa y empieza a toser, el niño se levanta y le da golpes por detrás hasta que como una especie de déjà-vu, Junmyeon hace un gesto con la mano para que se detenga.

—¿P-por qué dices esas cosas, Kyungsoo? —señala Yixing nervioso sin poder comer. El mocoso se encoge de hombros.

—Lo escuché.

—¿De quién? —pregunta exaltado su papá.

—La mamá de JongIn dice que ustedes son como una pareja que llevan muchos años de casados... Y a mí me gusta así—agrega vacilante esto último.

—Pues no le hagas caso a la señora—ordena en un tono firme, aún con su rostro hasta sus orejas enrojecidas—. Debe ser que tanta agua de mar ya ha atrofiado su cabeza—refunfuña Junmyeon arrugando su rostro.

El niño ríe y Yixing sigue con la cuchara a medio camino. No sabe por qué de repente se siente inquieto con lo que mencionó el niño, ni siquiera puede mirar a Junmyeon a los ojos sin sentirse avergonzado, tampoco puede explicar por qué su corazón late aceleradamente.

—¿Casados? —pregunta tardíamente. Esta vez el niño no responde y sigue comiendo.

—No le hagas casos, Yixing —agrega seriamente el otro hombre.

En eso, Kim Taeyeon, madre del pequeño Baekhyun y vuida del señor Byun, se acerca a su mesa. Yixing bufa bajito pero el niño le ha pillado y le guiña un ojo antes de dirigir su mirada a la señora, dueña del restaurante en donde se encuentran.

La mujer de cabello azabache ondulado, camina contoneando sus caderas y los saluda con una enorme sonrisa que solo parece extenderse cuando sus pequeños ojos se posan sobre Junmyeon, quien se sonroja, incluso más, por la atención recibida.

—¿Les gustó la comida? —pregunta, pero su mirada está fija en un solo hombre.

—Estuvo todo absolutamente delicioso —Junmyeon responde satisfecho con una pequeña sonrisa, que revuelve el estómago de Yixing—. Gracias por la atención.

—La sopa estaba salada —dice el niño imprudentemente, ganándose una mirada fría por parte de su progenitor mientras que el extranjero intenta no reír y coloca su mano sobre sus labios para evitar que su risa escape.

—¡Kyungsoo!

La señora le sonríe al niño, pero Yixing puede notar que no es un gesto sincero.

—No se preocupe, Junmyeon —interviene la señora—. Los niños no saben apreciar la buena comida.

—Estuvo muy rico, pero la sopa estaba un poco salada para mi gusto —Yixing añade bajo un tono formal no ha podido guardarse su opinión, arrepintiéndose al instante, tal vez fue demasiado; pero es que esta situación con la viuda no le gusta.

Like Water, Like Rain || LayHo/SuLayDär berättelser lever. Upptäck nu