11_Sustos en el bosque

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Angie miró hacia abajo y nos vió, comprendió el porqué estábamos allí y cogió sus pertenencias.

- Sabíais que estaba dormida, ¿la bocina a qué vino?

- Bueno, quería devolverte cuando me lo haces a mi - respondí enseñándole el vídeo. Me puse debajo de la ventana de Drew y puse la bocina, ahora le tocaría a él. Puse el vídeo y...

- ¡Nos hundimos capitán! - escuchamos el grito de Drew y seguido de un golpe seco, se habría caído se la cama.

Salió a la ventana y cuando nos vio lo comprendió, pero cuando bajó empezó a perseguirme. Yo sólo empecé a andar hacia el bosque, que está al pie de una montaña a unos 5 minutos casi 10 de nuestras casas. Al llegar seguí corriendo por si acaso pero al mirar hacia atrás en un intento de ver si Drew me perseguía, choqué contra un árbol. Me caí de culo contra el suelo y para mi suerte, había chispeado aquella tarde y el suelo estaba algo cubierto de barro, que me manchó los pantalones. Se rieron, estaba claro que se iban a reír. Holly sacó unos pantalones de la mochila, yo estoy ya porque puede sacar de ahí un elefante y vivo.

- Toma, sabía que pasaría algo como esto así que lo traje, menos mal - dijo ella con aires de superioridad, como si lo previese todo.

- ¿Por qué me conoces tanto? - pregunté cogiendo el pantalón.

- Soy tu hermana, es obvio que te conozco mucho, ve detrás de un árbol o algo, no miraremos.

- Ni siquiera querríamos - se escuchó decir a Angie por atrás.

Me alejé de ellos y me cambié como pude, al volver Holly metió los pantalones embarrados en una bolsa y le hizo un nudo. Siempre va preparada para todo, literalmente todo, esa mochila suya era mágica porque cabía cualquier cosa. Empezamos a sacar unas mantas porque hacía bastante viento, las linternas para contar historias escalofriantes y nos preparamos para sentir miedo.

- ¿Puedo empezar yo? - preguntó Angie emocionada.

- No, tiene que empezar la nueva integrante - habló Holly mientras señalaba a Mar.

La mencionada se removió en su sitio, como si estuviese acordándose de alguna historia.

- Pues, por mí bien, - dijo al final - os voy a contar una historia de creepypastas. - nosotros la miramos confundidos porque no habíamos escuchado sobre algo llamado así - Os contaré la historia de Laughing Jack.

Estuvo un rato contándonos, de repente podía hacer énfasis en alguna palabra y me sobresaltaba, o pausas dramáticas para meter suspense. Cuando terminó, advirtiendo que iba a por niños y niñas de menos de 14 o por esa edad, pensé que era un alivio tener 14 justo. Aunque fuera falsa la historia daba miedo la manera en la que la contaba. Ahora dijo Drew.

- No sabía que te gustara ese tipo de cosas de terror, parece que te van mejor las Barbies.

Mar se puso seria y lo miró como si la hubiera ofendido.

- Para tu información nunca me gustaron las muñecas muchos, era más de jugar con coches, y si, me encanta el tema del horror e invocaciones.

- Cuidado, la princesita se enojó - utilizó el sarcasmo Drew.

Nos miramos los demás entre nosotros, con una sola mirada habíamos hablado más que en un día entero.

- Pues cuéntanos cómo se puede contactar con las personas muertas - dijo con determinación Holly.

- ¿Con quién queréis hablar? - preguntó Mar.

- Esto, es solo curiosidad por mi parte - explicó dando excusas mi hermana.

Sabía que pensaba en mamá, en los pocos días que le quedaba por el cáncer, y el cómo poder contactarla cuando se vaya al paraíso que merece.

- ¿Nos puedes contar otra historia? Las tuyas dan miedo, no como las de ellos - nos señaló Angie.

Nos quejamos soltando un "hey" pero nada más.

- Obvio, a mí me encantan, esta ahora es la historia de Zero, mi favorita de las femeninas - y se puso a relatar la historia con pelos y señales. Al terminarla Drew comentó a Angie algo como "tengo los pelos de punta". O eso creo, yo estaba pensando en otra cosa. Al parecer Mar se dio cuenta porque me preguntó.

- ¿Te pasa algo? Estás como... Pensativo.

Volví a la realidad y le contesté.

- Si claro, es solo que yo de pequeño también tenía amigos imaginarios, - hice una breve pausa - y también los enumeraba.

Ella parecía extrañada.

- ¡Qué casualidad! - yo solo me limité a asentir.

- Pero los míos tenían las letras del alfabeto, así que se llamaban A, B, etc.

- Bueno, será otra coincidencia más en este mundo - Mar sonrió.

- Si... - empecé a recordar cómo les echaba la culpa a ellos cada vez que hacía algo malo.

Sin quererlo sonreí con vergüenza, no es que me portara mal, sino que era muy travieso... Al final va a ser lo mismo. Reí en mi mente, no era de desobedecer pero mis "maldades" hacía reír a mis padres.

- ¡Alejandro! ¡Vuelve con nosotros! - exclamó Drew sacudiéndome.

- Ya Drew, estoy aquí - respondí tartamudeando por las sacudidas.

Aún así seguía sin soltarme. Angie lo cogió a él de los hombros haciendo que me soltara por fin y que la mirara a los ojos. Drew tenía una cara de "No entiendo que está pasando ahora" y Holly, oh, Holly tenía cara de querer apartar a Angie de un puñetazo. ¡Y es su mejor amiga! Definitivamente no comprendo a las mujeres pero, ¿quién lo hace? Ya nos estamos desviando, estábamos con las historias, bueno sigo narrando que os vais a cansar. Esta Angie contando una historia de "terror" porque era su turno, pero no daba miedo así que acabamos riendo.

De repente, se escucharon unos crujidos a la distancia y no le dimos importancia, bueno yo si. Intenté olvidar que había escuchado eso pero volvió a sonar más cerca, ya me estaba inquietando, los demás seguían sin ni siquiera oírlo, ¿lo escucharía solo yo? Me estaba desesperando, estaba más cerca porque se escuchaba más fuerte, de repente los crujidos pasaron a ser pasos. Estos pasos si alertaron a los demás y por fin se dieron cuenta, ¡tardaron! Ya estábamos todos de pie, cuanto más tiempo pasaba más se escuchaba.

Nosotros solo empezamos a correr, a correr hacia la nada porque no sabíamos adónde ir. Incluso fue tan apresurado que nos olvidamos coger las cosas que habíamos traído. Solo teníamos las linternas en las manos e intentábamos apartar las ramas de árboles para huir. Saltar piedras y no tropezar, mientras los pasos se sentían muy cerca, nos pisaban los talones lo que fuera que sea aquello. Intentaba pensar en que no pasaba nada, me costaba, me costaba bastante porque eso sí que era como estar en una película de terror. Normalmente no me dan miedo porque sé que son películas y es ficticio pero esto era muy real.

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Holiwi ¿qué tal?
Espero que genial, yo estoy bien (este es mi típico saludo).

¿Qué les estará persiguiendo? ¿O quién?

1198 palabras

Hasta la próxima fénix oscuros (esta es mi típica despedida).

Un esclavo más (Editando)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora