La forma en que era [L.H]

2

—¿Cómo están tus padres?—Em me pregunto mientras la dos estábamos en el sofá viendo las repeticiones de the office.

Gruñí, no me gustaba que ella supiera de mis padres, no quería hablar de lo decepcionante que era para ellos, era obvio que no apoyaban mis elecciones. Siempre me preguntaban que porqué no era como mi hermano Emmet, que estudiaba derecho en la universidad. Realmente no me importaba ser su hijo favorito, Emmet odiaba la presión que mis padres le pusieron. Siempre había querido ser abogado, Emmet tenía razón, lo tuve más fácil porque podía escapar de sus estrictas reglas y su obsesión por ser perfecto.

—No me apoyaron estudiando música. Querían que estudiara negocios y como no estoy haciendo eso, no me ayudaran económicamente, como lo hacen con Emmet. Así que tendré que encontrar un trabajo pronto.—Respondí después de un rato, mirándome las manos.
—Eso apesta, Lou, pero estoy muy orgullosa de cómo te defiendes. ¿a quién le importa lo que piensan tus padres? Se que lo harás muy bien en la industria de la música.—Ella aseguro, apretando mi hombro.

Sonreí, agradecida por lo que dijo. Emily siempre supo cómo hacerme sentir mejor, ya era bastante tarde y pude ver que algo estaba molestando a Em. Luke no estaba aquí en este momento, pero al ver que constantemente miraba el reloj, supuse que sentía preocupación por Luke.

—Sin embargo, espero que tengas razón. Estoy bastante nerviosa por la universidad, espero que sea fácil conocer a otras personas.—Hable, intentado que se distrajera de la preocupación.

—Lo harás genial, harás nuevos amigos, te lo prometo.—Ella sonrió antes de bostezar.

Estaba cansada y no la culpo. Había sido un largo día caminando por Nueva York y luego terminamos decorando mi habitación un poco con algunas cosas que tenia de mi antigua habitación. Era pasada la medianoche y parecía que ella necesitaba dormir lo que quedaba.

—¿Em? Deberías ir a dormir un poco.—Dije, pero ella sacudió la cabeza rápidamente. Fruncí el ceño, sin saber por qué era tan terca.

—No puedo, iré a dormir cuando Luke regrese. Solo quiero asegurarme de que esta bien, no contesta mis mensajes.—Murmuro ella.

Suspire, no me gustaba que Luke la preocupara de esta manera. ¿Por qué simplemente no podía responderle? Sabía que Em se preocupaba con facilidad. Por cierto, se estaba obligando a mantenerse despierta, esto parecía que había sucedido muchas veces antes.

—¿esto sigue sucediendo desde mucho? Quiero decir, ¿sale demasiado?—Le pregunte, recordando nuestros años de secundaria cuando Luke solía salir y emborracharse.

Había mucha ira y tristeza dentro de él. Desde que su padre los abandono cuando Em y Luke tenían dieciséis años, Luke había sido así. Intento eliminar el dolor dentro de el y funciono durante un par de horas, hasta que volvió a estar sobrio.

—S-sí. Al menos una vez a la semana. Algunas veces llega a casa como si hubiera estado en una pelea y otras veces trae a una chica con él, pero generalmente se tropieza con el sofá y se queda dormido allí. Solo quiero quedarme despierta para asegurarme de que no le ha pasado nada malo. Tengo miedo, Lou. ¡No sabría qué hacer si le sucedió algo malo y le prometí a mamá vigilarlo!—Susurró, con su voz quebrada al final.

Suspiré, abrazándola. No me gustaba ver a mi mejor amiga tan triste, ella solía ser muy feliz y positiva.

—¿Sabes qué Em? Me quedaré despierta y lo esperaré. Te despertaré si no ha vuelto a casa a las tres de la madrugada, ¿de acuerdo? Ve a dormir, lo necesitas—Dije, sabiendo que ella lo necesitaba.

—¿Estás segura? No quiero molestarte con eso"—Murmuró, pero noté la mirada esperanzada, así que sonreí y asentí.

—Estoy segura, Em, ve a dormir. Lo esperaré—Le aseguré por última vez.