Horas muertas

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POV Natalia

Ya habían pasado varias semanas desde el accidente de Alba, quedaba un solo día para que cumpliera mis 24 años y la felicidad no abarcaba mi ser. El verla aún sin dar ninguna señal nueva de vida, me llevaba por la calle de la amargura, me destrozaba verla así, era un ser de luz y de alegría, y se habían cargado la poca luz que quedaba en ella

-Natalia... La hora de las visitas ha finalizado... - la voz de Sabela a mis espaldas me hizo apartar los ojos de Alba, no tenía muchas ganas de irme a casa

-Pero yo me quiero quedar.... Por favor, me he ido todos los días a la hora que tocaba... Déjame pasar la noche aquí, que mañana no voy a estar, quiero estar todo lo posible con ella, por favor, por favor, por favor, por favor - hice un pucherito adorable sin dejar de acariciarle la mano a Alba, quería que sintiese que estaba con ella

-Vale, pero como excepción, ¿eh? - su acento gallego resonó con fuerza en aquella frase- Ahora descansa, que necesitas dormir- tras esto, Sabela cerró la puerta y se fue de la habitación, yo me acomodé en el sillón y miré a Alba

-Se que volveré a ver tus ojitos color miel algún día, abriese de nuevo, y a partir de ese día, toda la felicidad habrá vuelto a la vida contigo cariño-mis palabras eran susurros, estaba dejando salir esas palabras del fondo de mi ser, y era algo que me escocía un poco, pues como cada día,me abría a ella y no reaccionaba

Me dormí agarrada a su mano, como si esta fuese mi tabla salvavidas para no perder la cordura, para saber que, en realidad, Alba seguía conmigo, a pesar de todo, estaba a mi lado, luchando, contra la mismísima muerte, por abrir los ojos. Curiosamente, aquella noche dormí sin dificultad, sin pesadillas o sin malestar... No se si por el cansancio de tantas semanas durmiendo fatal o es por el echo de estar al lado de la persona que me transmite tanta paz, la cuestión es, que cuando abrí los ojos, los tallos de luz entraban por la ventana del hospital y se llevaban a Alba de mi lado

-¿Qué hacéis? ¿Dónde la lleváis?- el letargo que se posaba en mis hombros desapareció de un plumazo

-Calmese, vamos a hacerle un tac debido a que esta noche ha movido un poco una de sus manos.... Necesitamos que se marche, ya le llamaremos cuando tengamos los resultados- aquel joven médico se recolocó las gafas y me dedicó una leve sonrisa-- así que si quiere la información, pregunte por mi, soy Flavio

- Vale... Entonces... ¿Me tengo que ir?-él asintió y me acompañó a la salida

-Cualquier cosa que descubramos, le avisaremos

Y esto fue lo único que recuerdo hablar con ese médico, llegué a mi casa y me arreglé, estos 24 años iban a ser extremadame agridulces,  por l sencilla razón de tener a Alba tan cerca y tan lejos al mismo tiempo. Decidí hacer caso a Pablo e ir al concierto junto a él por Alba, seguramente sabía la ilusión que me hacía y si no fuese, me echaría la bronca del siglo.. A eso de las 17:00,Pablo y yo nos fuimos al concierto, donde, unas horas antes de que todo comenzará, pude estar un rato hablando con aquellos pedazos de artistas que tanto admiraba, el tiempo que estuve en el concierto me sirvió para desconectar un poco de la dura realidad que estaba viviendo y de la que el pobre Pablo se comía todos mis temores e inseguridades

- Con esto ya estás mejor... - una afirmación rotunda por su parte, que asco me daba cuando era así de directo conmigo

-Si, me sirve para desconectar - fue decir esa palabra y que un escalofrío lleno de malas vibraciones inhundara mi cuerpo

-¿Pasa algo Natalia? - Pablo me miraba con curiosidad, el concierto acababa de finalizar y al ser las 9 de la noche íbamos a cenar

-Creo que a Alba le ha pasado algo... Bueno, creo no, presiento... Llévame al hospital

Tras mucha insistencia por mi parte, Pablo me llevó al hospital, y una vez allí, fui corriendo a la habitación de Alba y me topé con una escena terriblemente horrible... Alba colvunsionando y una persona con el cable de la máquina en su mano

-¿PERO TÚ QUIEN COÑO ERES Y POR QUÉ DESCONECTAS A MI CHICA? - los gritos atrajeron a varios enfermeros, entre ellos Marilia, una chica que todo Madrid conocía por su dulzura y simpatía

-Yo solo cumplo órdenes.... - Susurró el chico con temor en su voz, si no llega a ser porque Marilia me retuvo le hubiese matado allí mismo

-Natalia, tranquila... - Marilia volvió a conectar a Alba y yo intentaba controlar mi respiración--y tú Joan... Fuera

El chico salió corriendo con lágrimas en los ojos y yo miré a los únicos que quedaban en la habitación, además de Pablo, el cuál estaba en shock... Flavio, Sabela y Marilia

-¿CASI HACE QUE MUERA Y LE DEJAIS ESCAPAR?-estaba histerica, ciega de ira, no comprendía el comportamiento de él equipo médico

-Si... Pero porque este chaval es solo un peón... El caso de su chica es complicado... - Flavio me miro y al ver mi confusión, rió levemente--Soy la pareja de la agente de policía que lleva el caso de su chica... Si no le he retenido aquí, es porque ese chaval Joan, actúa obligado, aj igual que muchos más por alguien llamado "black shallow"

No entendía nada, así que él suspiró y me dio un suave apretón en el hombro

-Mi chica hablará mañana con usted... Pase aquí la noche, querrá estar con ella - tras esto, todo el mundo, excepto Pablo y yo, salió dejándola habitación si rastro de estruendo alguno

-Yo mejor te dejo a solas con ella....e voy con los dos felinos locos - Pablo se despidió con un cálido abrazo y se marchó algo cabizbajo

Sabía que estaba así por todo lo que había pasado, esos minutos en los que Alba estaba agonizando por no estar conectada, me parecieron, horas muertas, horas eternas, en las cuales acariciaba con las puntas de mis dedos, la verdadera tragedia

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Hola a tod@s, nada, pasaba por aquí para agradecer el apoyo que le estáis dando a esto, joe, q sois mu bonicos y os quiero mucho 🖤🥺, nos vemos en el siguiente capítulo

Y volviste a míWhere stories live. Discover now