II

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—¡Charly! —Llegaba todos los días a saludarme con un abrazo y una sonrisa enorme.

—Kathleen. —Era una forma de saludarnos, aún la llamo y digo su nombre.

Pasabamos la mayor parte del tiempo juntos, pero no se confundan, ella me vio como su amigo durante un largo tiempo, También se hizo muy amiga de otros dos compañeros, Mar y Chris, a quienes consideraba como sus mejores amigos.

Un día llegó muy emocionada porque un “amigo” le presentó a un tipo que sentía una cierta atracción hacia ella, ¿qué si me dolió? Es más que obvio, pero ese no es el punto.

Se conocieron, ella decidió esperar al momento indicado para darle el “sí” al Tom ese; cada mes que pasaba junto a él se “enamoraba” más de él, y yo fui testigo de eso. Pasados dos meses su relación, él le pidió dejar de hablarme, y como ella siempre fue su sumisa, lo hizo, por los próximos seis meses me olvidó; y sí, ya estábamos a punto de cursar el segundo año de universidad y ella seguía sin hablarme, yo comencé a ser un patán diciendo cosas hirientes hacia su persona, para ese momento yo me había hecho muy buen amigo de Nando y Jack.

Aún recuerdo la fecha exacta: 24 de septiembre de 2018, yo había llegado más temprano que de costumbre a la U, y la encontré esperando afuera del salón de clases, al poco tiempo llegó Tom, ella se levantó y decidida, lo encaró.

Lo veo en tu mirada Donde viven las historias. Descúbrelo ahora