Último set; atsuhina

capítulo único

Último set

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él era su canción, la banda sonora de su vida; pero ahora, todo está en silencio y ya no sabe oír otra distinta

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Como ya saben, la idea y todos los personajes de Haikyuu le pertenecen al gran Haruichi Furudate sensei. ¡Disfruten mucho del one shot!

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Su cuerpo se tambalea con ligereza cuando sus pies tocan el suelo. La palma de su mano derecha arde y Hinata, entre el silencio que reina el estadio, mira perplejo al líbero del Schweinden Adlers. Él se ha lanzado al suelo, estirando el brazo, pero no ha llegado y el balón rebota lejos de él.

En ese instante, suena el silbato que marca el final del partido. 29-31. Los MSBY Black Jackals han ganado.

La euforia estalla como fuegos artificiales en las gradas del equipo ganador, haciendo temblar los cimientos. El público, que se ha mantenido tenso en sus asientos y con el corazón en un puño, ahora salta, grita, llora y se abraza. Entre ellos, Akaashi, que sonríe y aplaude con los ojos empañados en lágrimas al protagonista de su mundo junto a Tenma, que vitorea. No muy lejos, los veteranos del Karasuno, que, con el corazón dividido, no celebran la victoria, sino el juego completo, porque Shōyō y Tobio han hecho del partido un espectáculo. Aunque a Asahi y Tanaka se le escapa alguna lagrimilla mientras que Yamaguchi y Yachi lloran a moco tendido.

En la cancha, las piernas de Kageyama no aguantan más y cae sentado al suelo, con el corazón en la garganta y el cuerpo latiendo, exhausto. Su equipo no dice nada. Todos se ahogan en un silencio derrotado que duele.

Detrás de la red, los Black Jackals se buscan, todavía estupefactos, abrumados, perplejos, y se encuentran y se abrazan (incluso Sakusa, a quien Bakuto atrapa, aunque se promete embadurnarse de abajo arriba con su mejor repertorio de antisépticos cuando esto acabe) y a alguno le gana la emoción y solloza, pero feliz, porque todo ha merecido la pena.

Los ojos de Tobio le buscan. Siempre lo hacen, incluso cuando no quiere. Y es difícil no encontrarle, porque Shōyō resalta allá donde va.

Ah, ahí está.

Sus labios se curvan con ligereza. Hinata ha saltado sobre Atsumu, enganchándose como un mono. Miya le devuelve el abrazo, con fuerza, aferrándole a él como si vida dependiera de ello, escondido su rostro en su hombro. Es a él a quién le ha ganado la emoción y el que llora mientras, en sus brazos, Hinata ríe, con la fuerza de mil soles, acariciando su cabello.

El pecho de Tobio se oprime y pestañea varias veces seguidas cuando su vista se empaña. Quiere pensar que llora por la derrota del partido, por la impotencia de haber perdido, por haber sido testigo de un ataque rápido que no han podido parar.

Pero mentiría, porque la derrota le pone triste, sin embargo, el dolor nace de otro sentimiento.

Perdí, piensa, los labios temblándole y el sudor resbalando por su rostro, mezclándose con el agua que se desborda de ese mar profundo que tiene como ojos.

Te perdí, ¿verdad, Hinata?

...

estoy harta de estar inspirada en plena época de exámenes ahre

¡hey, heey, heeey! 

este one shot lo colgué en twitter (ohmybokuto_ por si quieren stalkear) pero los límites de caracteres no me dejaron extenderlo ni profundizar tanto como quería, así que tocó recurrir a fanfiction y mi estimado wattpad :')

el ship kagehina me causa muchísima ternura, sin embargo, fue ver a tsum-tsum con hinata en el equipo y BAAAM el atsuhina me absorbió por completo jkajaka

espero de corazón que se encuentren bien en mitad de esta pandemia surrealista y tengan mucho cuidado. «3 ¡muchísimas, muchísimas gracias por leer!

¡que la vida no les sea tan dramática como los fics iwaoi!

💚