Cartas a mi Abuelo.

carta 2

Abuelo:

Así queda mejor.

Extrañarte es poco pero me quedan tus recuerdos.

Como ese día que me llevaste a andar en bicicleta por primera vez.

Tenía mucho miedo pero vos me dabas esa confianza a seguir y a poder andar sola.

Vos y la abuela también tenían miedo de que me caiga.

Y pasó, me caí y casi me rompo la nariz... Fue lo más trágico que me paso. Esa tarde me pusieron manteca, si manteca, en la cara. Para la hinchazón.

No sé de dónde lo sacaron pero bueno, creo que funcionó.

Me acuerdo que tenían miedo de lo que mamá les diga.

Desde ese día no salí nunca más sin rueditas y los días de viento.

Preferían que anduviera en casa

Y yo también así lo quería.

Tu nieta.