Capítulo único

499 66 41
                                    

Quiero dedicar este OneShot a @Alhecasanova97, pues fue la persona que me animó a comenzar a escribir mis fanfics; además de que le gustó mucho esta loca idea que se me ocurrió 😅. Espero la disfruten... o la sufran, depende.

************************************************************************

—¡Espérame, Miyuki Kazuya! ¡Definitivamente entraré también a los Fukuoka Softbank Hawks, y formaremos batería una vez más! —Fueron las palabras de Sawamura, ahogando su llanto luego de la graduación del cátcher, que acababa de ser reclutado.

—Jajajajaja. —Una sonrisa burlona fue la respuesta—. Entonces tienes un largo camino por recorrer, debes demostrar a todos que puedes brillar en el montículo aunque yo no sea quien atrape para ti —le dijo, tratando de que el sarcasmo ocultara el inmenso vacío que le provocaba estar lejos de su novio a partir de ahora.

Luego de la victoria en koshien, en el verano del segundo año del pitcher durante la preparatoria, este decidió romper el silencio que mantenía prisioneros sus sentimientos, comunicándole a su senpai su interés romántico hacia él, pues, antes de que lograra hacer algo para impedirlo, la extrema admiración había evolucionado a algo mucho más fuerte y profundo, y ese algo había flechado a ambos, pues la respuesta de Miyuki no fue dada verbalmente, un beso selló la promesa del nuevo comienzo para ambos.

En su tercer año en Seido, Eijun logró pararse en el montículo del torneo nacional de verano por segundo año consecutivo, portando el número de Ace en su espalda; lamentablemente, en esta ocasión, el viaje solo duró hasta cuartos de final. A pesar de que habían conseguido forjar un equipo fuerte, no era como el anterior, por lo que el bicampeonato se quedó como una meta inalcanzable.

No se habían coronado victoriosos, pero el desempeño del castaño fue espectacular, lo suficiente como para atraer miradas que trajeron consigo tentadoras propuestas... pero ninguna de ellas vino de Fukuoka, estampando frustración e impotencia a su rostro, que se sustituyó enseguida por esperanza y espíritu de superación. «Mientras juguemos béisbol, estaremos conectados ¿Cierto, Kazuya? Este no es el final», pensó.

Aceptó la propuesta de los Yomiuri Giants, firmando un contrato bianual, con la convicción de que la solicitud para entrar a los Softbank Hawks llegaría si continuaba esforzándose.

La distancia no dejaba de ser dolorosa, solo poder contactarse por mensajes o llamadas telefónicas, verse furtivamente cuando dispusieran de sus escasos días libres, o cuando las clases en la universidad se los permitieran... Era difícil, no lo podían negar, mas valía la pena; los besos apasionados, las tiernas caricias, la necesidad desenfrenada e incontrolable por el contacto físico, y la pasión desmedida unida al placer incomparable que impregnaba el ambiente cuando compartían alcoba, eran suficientes para depositar su fe en el futuro y las posibilidades.

Habían pasado cinco largos años, ambos concluyeron su educación superior a la vez que jugaban béisbol en sus respectivos equipos. Sin embargo, aquella promesa de jugar juntos, desafortunadamente, no se cumplía por completo aún...

(...)

La mañana de un soleado y tranquilo domingo, en una de las jaulas de bateo del campo de entrenamiento de los Halcones, las noticias deportivas matutinas se escuchaban desde una pequeña radio de batería, situada en la banca, detrás de unos cabellos castaños mecidos por el movimiento del swing y unos ojos ámbar que seguían el curso de la bola, tras impactar en el bate de madera.

“El famoso pitcher revelación: Sawamura Eijun, que al salir de la prestigiosa preparatoria Seidou estuvo por dos años en las filas de los Gigantes de Yomiuri, para luego ser llamado por los Softbank Hawks, acaba de anunciar, apenas, hace un par de días, la renovación de su contrato en Fukuoka, sellando así el inicio de la que será una temporada sumamente interesante. Todos están a la expectativa de la redención del equipo, que ha estado en una mala racha en el último par de años desde el desafortu..."

Despertar (Miyusawa)Where stories live. Discover now