Temores

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Ainora :

Son las 7 de la noche y me despierta una llamada, reviso mi teléfono y es de Amtoh así que contesto enseguida.

-"¿Bueno?"

-"Hola Ainora, que bueno que contestas, solo para avisarte que Alexa fue admitida, y la avanzaron hasta el 5to grado de primaria"

-"Me sorprende que no la avanzarán hasta secundaria"

-"Te dije que es una escuela de muy alta demanda con los mejores alumnos de todo el país"

-"Esta bien, ¿Cuándo inicia?"

-"El lunes"

-"Dame un número de cuenta para que te deposite y dime cuanto dinero se necesita para la inscripción, uniformes, libros, cuadernos y materiales"

-"Si, ahora te envío el número de cuenta y la cantidad"

-"Gracias"

-"¿Quieres hablar con Alexa?"

-"¿Esta contenta?"

-"Si, a estado jugando con Dmitry"

-"En ese caso no hace falta"

-"Bien"

Me despedí y colgué, claro que quería escuchar su voz, su linda voz, pero eso solo me recordaría una cosa ahora, ella No es mi hija, yo no la tuve, solo la robe de su familia.

-"Como quisiera que estuvieras aquí Alex, tu sabrías perfectamente que hacer" - dije triste y me volví a acostar.

Amtoh :

-"Quiero a mi mami" - dice Alexa caundo llegamos a casa.

-"Tu mami no se siente bien, por ahora debes quedarte con nosotros" - le sonreí

-"Esta bien" - dijo mirando a el piso.

-"Bueno niños es hora de dormir" - les dije.

-"Si" - respondieron ambos.

Dmitry:

Mi madre nos a llevado a ambos a la cama y le han dado el cuarto junto al mío, estoy tranquilo mirando el techo, pensando en la nueva escuela cuando comienza a llover, me desagrada la lluvia y más los truenos que caen, me recuerdan el día en que esos hombres me llevaron, me levanto y tomo un cuaderno y mis colores, me siento en mi escritorio y prendo la lámpara para comenzar a dibujar, cuando escucho que se habré mi puerta.

-"Ya te eh dicho que no hace falta que vengas cuando llueve mamá" - dije sin mirar.

-"Dmitry, tengo miedo, ¿puedo dormir aquí?" - esa es Alexa.

Aunque es muy pequeña me agrada, no es molesta como otros niños y no me disgusta su presencia, me levanto de mi silla y la ayudo a subirse a mi cama.

-"Gracias" - dice sonriendo como siempre.

-"Duremete, yo voy a dibujar"

-"¿Por qué no te duermes?"

-"Nunca puedo dormir cuando llueve, esperare a que disminuya la lluvia para dormir"

-"Pero yo no ouedo dormir sola" - dijo triste.

Por alguna razón me puso mal verla triste, ella que siempre esta sonriendo y hablando sin parar ahora solo mira sus manos mientras sus ojos se llenan de lágrimas.

-"Bien, haste a un lado, me voy a acostar" - dije serio.

Ella asintio y se recorrió, apague mi lámpara y me acosté, la tape primero y luego me tape yo, cada que escuchaba caer un trueno me estremecía y comenzaba a sentir un sudor frío, hasta que sentí su pequeño brazo sobre mi.

-"No tengas miedo, si tu me cuidas yo te cuido" - me dijo

Me gire y la abrace y ella a mi y luego ella comenzó a cantar una canción de cuna.

-"Dame tu manito y cierra los ojos
Que con este canto tus sueños van a llegar
Todas las estrellas te van a alumbrar para que con magia puedas volar
Y la luna buena menguante estará y sonriendo con ella vas a jugar
Una estrella fugaz pasará y con su colista te hará brillar
Y la noche entera feliz la vas a pasar"-

-"Ya duérmete Alexa"

-"Es que extraño a mi mamá" - se puso a llorar.

Yo sabía como se sentía porque cuando era chico también lloraba cada que mis papás se iban de viaje y me dejaban solo, así que la abrace y también intente consolarla aunque no funcionó muy rápido, pero pronto se quedó dormida y yo también.

Ainora :

Despierto sudando después de ese sueño, otra vez volvieron lo sueños donde Alex esta cargando a nuestro hijo y ambos corren hacia a el mar y me hacen señas de que los siga, me pongo de pie y salgo de la casa para bajar a la playa, esta lloviendo y el mar está yn poco revuelto pero aún así comienzo a entrar, y siento como me jala por debajo pero me aferro para quedarme de pie y los veo, los puedo ver, a ambos adentrado en el mar sonriendo y pidiéndome que me acerque a ellos.

-"¡YA VOY AMOR!" - grito y el sonríe

Entro más y el agua me llega a la cintura y cada vez me acerco más a ellos, ya ouedo sentirlos cuando algo me hace regresar a la realidad.

-"¡Ainora!" - esa voz, su voz.

Me giro y está de pie en la orilla de la playa gritando, llamando mi nombre y quiero volver a la playa pero una ola me cubre por completo.

EgoístaWhere stories live. Discover now