Alter Ego

VI

El abismo me atrae, como un imán. Lo único que puedo pensar es en la oscuridad que me aterra, que me llama y que me condena.

Mis pasos van fallando a medida que me acerco, y por más que mi cuerpo quiera tirarse sin titubeos hacia aquella caída libre, mi mente se rehúsa.

Ella sí que sabe lo que es perderse. No querría estar allí de nuevo; pero me temo que ahora mi vida solo puede ir en esa dirección; después de todo, todos mis caminos van hacia esa destrucción.