Nunca pensé que encontraría el amor. Hasta ahora, mi vida se había basado en encuentros ocasionales con quien no sabía ni el nombre, o relaciones tóxicas, llenas de celos e infidelidades "Deja de buscar y encontrarás" Me repetían mis amigos, al principio, pensé que la única manera de ser feliz era con alguien a mi lado, hasta que les hice caso, aprendí a quererme a mi misma, a respetarme, y a no dejar que nadie nunca me hundiera ni me provocara una sola lágrima.
Ahí estaba yo, aprendiendo de mis errores para no volverlos a cometer, seleccionando a quienes realmente pertenecían a mi vida, amándome, sin esperar nada de nadie, sin ni siquiera pensar que existía el amor.
Hasta que llega él, quien te respeta y te valora desde el principio, quien se interesa y mira más allá del físico, aquel por el que te despiertas y te duermes con una sonrisa, por quien tienes el teléfono con sonido, esperando sus mensajes, con quien no tienes prisa, con quien no buscas etiquetar nada, con quien sin tocarte te provoca miles de cosquilleos, con quien sueñas todos los días con poderle abrazar, aquel a quien quieres confiarle tus secretos, con quien no piensas en qué pasará, sino que te dejas llevar, vives.
Las casualidades existen, y yo acabo de encontrar la más bonita.
