País de las aves bermellón.
Los ciudadanos a lo largo de las bulliciosas calles se sorprendieron cuando vieron a la joven vestida de rojo y de ojos carmesí.
"Es la Sexta Princesa. Dijeron que se había ido a entrenar, pero no esperaba que volviera tan pronto ".
"Tsk, tsk, la Sexta Princesa puede tener un talento sustancial, pero es desafortunado que sus ojos carmesí estén mal vistos en la familia Imperial y hayan hecho que sea impopular. Solo tiene el título de princesa, pero no se considera apta para llevar el apellido de la familia imperial ".
A pesar de escuchar su conversación, la joven actuó como si fuera indiferente y no mostró expresión alguna en su rostro.
De repente, una voz furiosa estalló a su lado, "¡Cállense, todos!"
La voz del joven estaba llena de ira cuando una luz fría brilló en sus rasgos arrogantes pero hermosos. Miraba fijamente a los ciudadanos que estaban en una profunda discusión mientras su largo cabello plateado deslumbraba bajo la luz del sol.
No hace falta decir que el joven era muy hermoso. Su belleza hace que uno se sienta asfixiado. Una sola mirada bastaba para acelerar la respiración.
“Oh, me preguntaba quién era. ¡Eres tú, Feng Qianhuan! "
Una voz desdeñosa intervino y provocó que la expresión de Feng Qianhuan se hundiera instantáneamente.
Todos vieron como una joven vestida con túnicas de brocado caminaba lentamente hacia ellos, seguida de cerca por un grupo de admiradores masculinos. La joven había querido burlarse de Feng Qianhuan cuando su mirada cayó sobre el joven de cabello plateado a su lado. Ella se deslumbró instantáneamente y solo pudo mirar tontamente sus hermosos rasgos.
No faltaron hombres guapos a su alrededor en esta vida, pero ninguno de ellos era tan guapo como este chico. Era tan hermoso que parecía inhumano. En cambio, era como un dios y era excepcionalmente impresionante.
"¡Si me miras por más tiempo, no me importaría sacarte los ojos 1!"
Los rasgos de Qianbei Xun se hundieron cuando sus ojos brillaron con intenciones asesinas.
No sabe por qué, pero de inmediato sintió una sensación de repulsión hacia la joven con túnica de brocado. ¡Incluso una sola mirada de ella hizo que se sintiera disgustado como si acabara de tragarse una mosca! Nunca se había sentido así antes.
Después de todo, Qianbei Xun nunca se ha aventurado a salir de los patios del palacio en estos últimos diez años. Incluso los lugares a los que había viajado eran lugares familiares como el Territorio del Loto Rojo, el Imperio del Viento Nuboso, la Orden Secreta o el Clan del Dragón. Nunca se había encontrado con una mujer que se hubiera atrevido a mirarlo con tanta codicia.
¡Esas personas solo lo verían con reverencia y no se atrevieron a mostrar ningún descaro!
Esta fue la primera vez que se encontró con una mujer con una lujuria tan manifiesta. Hizo que se le revolviera el estómago y casi vomita toda la cena de anoche.
"Feng Qianhuan, ¿dónde recogiste a este chico lindo?" A la joven con túnica de brocado no parecía importarle lo que acababa de decir Qianbei Xun. Ella lo miró con lujuria todo el tiempo. “Realmente sabes cómo escogerlo, pero un joven así es un desperdicio contigo. ¿Por qué no me lo vendes? ¡Puede nombrar su precio! "
A los ojos de la joven, Qianbei Xun debe ser un esclavo que Feng Qianhuan había comprado. De lo contrario, ¿por qué elegiría un hombre a una chica de ojos rojos? Sin embargo, Feng Qianhuan no tiene el favor de su Padre Imperial y el dinero que tiene era tan poco que era lamentable. Era probable que no hubiera gastado mucho para comprar a este joven.
Si viene conmigo, este joven seguramente podrá vivir bien y no tendrá que preocuparse por su sustento.
La expresión de Qianbei Xun se ha vuelto aún más fea.
¿Esta mujer realmente me considera un esclavo e incluso quiere comprarme? ¡Que broma!
"¡Zuo Qianqian, no debes cruzar la línea!" Los ojos de Feng Qianhuan se hundieron y escupió con frialdad: "¡No es un esclavo y no es un objeto para que lo compres! Espero que pueda mostrar un poco más de consideración. De lo contrario, incluso si ese hombre te protege, ¡no seré fácil contigo! "
¡El hombre al que se había referido era el Emperador del País de los Pájaros Bermellones!
