Capítulo 2

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Loki rápidamente fue a su oficina y tomó su maletín, tenía la esperanza de ver a su novio camino a la salida, al menos para dedicarle una mirada a modo de saludo y si la suerte estaba de su lado saludarse, aunque fuera con un simple buenas tardes, pero para su mala suerte no se lo encontró.

No pensó mucho camino a su casa, pues la fiebre y el dolor de cabeza no lo dejaban pensar, sólo quería cerrar sus ojos y despertar totalmente sano, para así atreverse e ir a ofrecer unas disculpas decentes a Thor.

Thor esa tarde no rindió como siempre en el trabajo, estaba realmente molesto como no lo estaba hace años, lo único que quería hacer era partirle la cara a Rogers, y exigirse una muy buena explicación a su pareja, pero tenía miedo de lo que podría escuchar.

Esperó afuera de la empresa, pero no hubo vista de Loki, tampoco tenía mensajes o algún indicio de que su pareja estuviera preocupado o al menos apenado por su mala actitud, o ahora con su reciente infidelidad, como le dolía pensar en esas palabras. Ante sus ojos apareció el culpable de todo, ahí estaba Rogers tan campante como siempre.

Aprovechó que se encontraba solo y lo siguieron unos metros, hasta dar con un callejón al lado de su lugar de trabajo, acto seguido, lo empujó contra este, arrinconándolo contra la muralla.

— Así te quería tener ¿qué diablos estás haciendo con Loki? ¿no te bastó con jugar por años con su sincero amor? Ahora, que al fin lo vez feliz, lo vuelves a seducir — gritó Thor realmente molesto y a segundos de darle una bofetada al hombre que tenía en frente.

—Pero ¿qué mierda te pasa? ¿qué te hace creer tal estupidez? sabes mi pasado con Loki, pero actualmente solo somos muy buenos amigos. Yo sólo tengo ojos para Tony — dijo un Steve de lo más sincero y directo, como siempre lo era.

— Hoy vi cómo se besaban — rugió Thor, escupiendo las palabras con rabia mientras tomaba a Steve por la camisa.

— Eres un idiota. Nunca nos dimos un beso, no sé que clase de cosas estás imaginando. Pero deberías hablarlo con Loki, él es tu pareja. Además, el no estaba bien, tuvo mucha fiebre, incluso dejó la oficina. Tu sabes como es él, tiene que estar realmente mal para dejar de trabajar — Rogers soltó ya aburrido de la situación que estaba viviendo, como pudo se soltó del agarre del otro hombre, y se fue, mientras a lo lejos escuchaba como Thor gritaba que todo era una gran mentira.

Odinson no sabía si creerle o no, como él iba a ser tan idiota de no darse cuenta que su pareja con quien había compartido desayuno esa mañana se encontraba tan enfermo al punto de casi colapsar en la oficina, además, él estaba muy seguro de haber visto un beso, "¿Pero, y si todo eran sus celos?", se apresuró a llegar a casa, necesitaba pensar con claridad antes de hacer cualquier movimiento.

Pasaron un par de horas, a la única conclusión a la cual llegó, es que su "lunita" lo necesitaba, así que tomó su abrigo y salió rumbo a la casa de su amado, necesitaba cuidarlo y tocarlo, saber que todo estaba bien.

Pero gran fue su shock, al ver entrando al departamento de su amor al mismo sujeto de esa tarde, ante sus ojos estaba Steve abriendo la puerta con sus propias llaves, algo que ni siquiera él tenía.

Thor no lo soporto más, todo era muy evidente, esos dos estaban saliendo juntos, nunca se había acabado lo que alguna vez hubo entre ellos. Se sentía realmente dolido, traicionado, decidió marcharse antes de hacer algo de lo cual se podría arrepentir, aún tenía una hija por la cual velar, no podía acriminarse.

Lo único que hizo fue sacar su móvil y llamar a su pronta ex-pareja.

— Thor — fue lo único que salió de la boca de Loki, su voz sonaba agitada debido a que le costaba respirar producto del resfriado. Pero que su pareja lo interpreto como otro tipo de acciones indecentes.

— Esto se acabó, no me busques más, háblame solo por temas laborales, me das asco — fue todo lo que gritó Thor consumido por la rabia, pero también por la tristeza, las lágrimas no paraban de cesar mientras apagaba su móvil, ni siquiera le dio tiempo a Loki para responder tales palabras.

En otro lado de la ciudad, el móvil de Loki rebotaba en el suelo, mientras él lloraba como nunca antes lo había hecho, jamás pensó que las cosas terminarían de esta manera, él no había sido capaz de hacer nada, sólo pronuncio un "se acabó" mientras se abrazaba a sí mismo, agradecía que su amigo hubiera dejado su departamento unos minutos atrás, pues no quería que nadie lo viera en este estado tan deplorable, esa noche lloró hasta quedarse sin voz, hasta que la fiebre lo consumió en un sueño muy largo.

El resto del fin de semana Loki no salió a ningún lugar, se aseguró de responder los mensajes de Steve, solamente para que este no lo visitara y se diera cuenta de todo, le escribió excusándose de no poder hablar ya que estaba afónico pero mucho mejor, lo que no era ajeno a la realidad, pues el resfrío había disminuyendo en intensidad, pero el dolor de su corazón cada hora dolía más y más, sentía que aún podía hacer algo, él no se daría por vencido tan rápido.

El domingo en la tarde no lo resistió, y dado que Thor no le contestaba, decidió llamar al móvil de Torunn, aunque se sentía muy avergonzado por haber recurrido a esta estrategia.

— ¿Tío Loki? — preguntó Torunn con su voz tan dulce como siempre.

— Torunn, cariño ¿tu padre está ahí? — preguntó torpemente el mayor.

— No, ya salió a encontrarse contigo. Dijo que irían a tomarse unas copas. No te ha contestado el móvil porque lo dejó en casa, pero de seguro ya llega — respondió la niña muy ajena a la situación actual.

—Ya lo vi en la puerta, perdón por preocuparte — fue todo lo que respondió Loki con una falsa felicidad.

Luego de esa conversación, donde claramente Thor no saldría con él, no tenía idea con quién rayos lo haría y eso lo llenaba de tristeza, y quizás algo de ira. Tomó su abrigo y salió rápidamente de casa, iría a todos los bares que frecuentaban hasta dar con él y lograr hablar. En medio de su recorrido lo pilló por sorpresa una lluvia muy intensa, empapándolo de pies a cabeza, pese a eso siguió rumbo a los bares, encontraría al jodido de Odinson.

Finalmente opto por el favorito de ambos, donde sólo iban en ocasiones muy especiales.

Lo encontró en la misma mesa donde siempre se sentaban, ahí estaba su amado muy arreglado y sonriendo de una forma cálida. Frente a él se encontraba Bruce Banner, uno de los socios de la empresa, él reía y conversaba animadamente. Ambos se veían entretenidos, como si lo estuvieran pasando realmente bien, como si fueran grandes amigos.

Se dio cuenta que no era un buen momento para entablar una conversación, sería realmente irracional de su parte interrumpir frente a alguien del trabajo, quizás, que problemas le generaría a Thor, después de todo, que estuvieran juntos bebiendo no necesariamente era por un amorío, a él mismo muchas veces le había tocado hacerlo por temas laborales.

Decidió que lo más sensato era esperar a Thor, cuando este estuviera solo, abordarlo y aclarar las cosas. En su larga espera apenas logró cubrirse de la lluvia, estaba todo mojado, incluso su ropa interior, el frío le calaba los huesos pero no le importaba, su única prioridad era arreglar el malentendido, no quería una noche más en aquella tortura.

Cuando por fin de dignaron a salir, fue muy sigiloso tras ellos, pero nunca terminaban de separarse incluso pasaron la estación de trenes, pero ninguno de los dos entró. Pero todo cambio cuando los vio dirigirse en dirección a una famosa calle por tener "hoteles" ya no había nada más que mirar, sabía a lo que iban y realmente le dolía.

Dio media vuelta y salió corriendo, quería llegar pronto a su casa pues las lágrimas lo invadían, tenía mucha rabia, mucho dolor, pero no era sólo su corazón el que dolía, también sentía que cada músculo de su cuerpo lo estaba matando.

No supo cómo llegó a su departamento, estaba desgarrado y la fiebre lo tenía mareado, nuevamente comenzó a llorar mientras su cabeza pulsaba, se sentía derrotado. 

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Gracias por leer  <3

Malos Entendidos (Thorki-Stony)Where stories live. Discover now