Nice Words ➢ CountryHumans x Lectora

Capítulo 3

— ¿Pasó algo? ¿Que intentaron ahora hacerle a Alemania? — interrogó con sospecha.

— Nada nada... por el momento — murmuró México recibiendo un codazo de parte del argentino que tenía al lado — Ya, ya, ya.  Nosotros solo estábamos con Kazajistán, Bielorussia y Ucrania.

— Bocrania — Corrigió el argentino.

— Si si, eso mero. — le restó importancia — también estaba Uruguay y... Rusia con nosotros — sonrió nervioso.

El alemán miró con confusión a lo que decían aquellos chicos, en si no respondían directamente sus preguntas pero, decían que estaban con aquellos eslavos, mostrándose brevemente confundido junto a España.

— Y luego, nos secuestraron.  — hablo finalmente normal aquel chileno — Bueno, no secuestraron.  En realidad no sabemos lo que pasó, de la nada nos metimos el susto de nuestra vida al hallar a... Rusia molestó — río un poco nervioso — solo recuerdo que nosotros dimos paso atrás y... caímos, creo.

— Lo que dijo el especial. — comento el argentino, ganándose una mirada desaprobatoria de parte de España y Chile — Pensamos que habíamos caido y nos dio una roca creó.  Cuando despertamos, estábamos tirados aquí.  Pensábamos que Rusia nos agarró, o algo y nos arrastró para torturarnos.  Pero casualmente los hallamos.

— ...

Quedaron en un profundo silencio pensando en esas palabras que dijeron. El de cabeza rectangular miraba confundido esa escena. Puesto a que no sabía y ni entendía bien el español, miro a su descendiente con confusión algo que captó rápidamente. Volteando su cabeza para verlo.

— Was ist los? (¿Que es lo que sucede?) — preguntó.

— Ich erkläre es dir später (Te lo explicaré luego) — Le respondió.

Los de habla española quedaron confundidos ante aquella pequeña interacción, no era que no sabían alemán, sino , se trataba de aquel hombre tan intimidante y más alto que ellos, quien parecía estar peor de perdidos que ellos. Tenían una nota mental de no hablarle y preguntarle por el momento, de por si estaba menos enterado, que ellos juntos.

— Yo... estaba haciendo mi trabajo — contó Alemania llamando la atención — Hasta que sentí un olor extraño, como si fuera alcohol, o algo parecido, como si fuera una droga. — reveló mientras sacaba un paño de sus bolsillos , y pronto removió sus lentes, con aquel papel comenzó a limpiar los cristales que estaban algo polvoriento. — Y me sentí adormilado. Quise defenderme dando algún codazo por detrás, sin embargo cómo olía aquel pañuelo, caí extrañamente dormido — Finalizo con su relato para observar principalmente a los latinoamericanos — supuse que era alguno de ustedes, ya que son los más capaces de violar la seguridad de mi departamento, y darme una sorpresa por detrás e arrastrarme a una de sus fiestas raras, cómo los "latinoamericanos que son y esquivan balas"

— Hey, eso sonó racista — frunció el ceño, México.

— Pero tiene razón — le siguió Argentina — fácilmente nos pone de blanco porque prácticamente somos capaces de hacer eso.

— Aún así, bromeamos entre nosotros eso. Que lo diga otra persona suena ofensivo — Chile miro hacia el alemán.

— Bueno bueno, chavales. No armamos una discusión por esto como lo hacen por Twitter, además también ustedes suelen decir un montón aquello — los paro España antes de formar una discusión, soltando un bufido llena de cansancio — Volvamos al tema, de por si ustedes fueron distinto. De que hayan secuestrado a Alemania es algo... imposible, por la seguridad que tiene, y que logren flaquearlo eso es extraño. Además de que estamos en un lugar que no conocemos.