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" Bienvenidos a la Famiglia оленя [ Cuervo ], niños ".

¿ Habían oído bien ?.

Primero ese hombre los robaba de sus familias, y después como si nada...

¿¡ Les daba la bienvenida a la suya propia !?.

¡ Debe de estar bromeando!.

Kensuke: es una broma... ¿ Verdad ?... - parándose frente a Tsuna, con la mirada afilada -.

Nataniel: yo nunca brromeó, mocoso... - mirándolos con molestia -.

Ante esto, ambos niños dirigieron su mirada sincronizadamente hacía Dimitri, como preguntándole si lo que Nataniel dijo era verdad.

Dimitri: no lo hace... - cruzándose de brazos, ante la mirada de ambos niños -, de todo el tiempo que he estado bajo su mando, nunca lo he visto bromearr con nadie, ni una sola vez.

Ante esto, ambos niños solo asintieron a Dimitri, y volvieron su atención nuevamente hacia el Jefe de los Cuervos.

Nataniel: ejem... Bueno... - sentándose en su elegante silla, con las manos cruzadas sobre su escritorio las orejas en alerta y una mirada seria -, Dimitrri, llevarrás a los niños junto con otrros de los chicos al centrro comerrcial y les comprrarras lo que lleguen a necesitarr como; rropa, zapatos, accesorrios, librros y demás. Después les darrás un rrecorrrido porr la mansión, parra que empiecen a familiarrizarrse con el lugarr, y no se pierrdan o anden currioseando porr ahí. ¿ Quedo claro, Dimitrri ?.

Dimitri: Как вода, босс ... [ como el agua, jefe ]

Nataniel: - asintiendo -, están despedidos.

Tras esas palabras, los niños fueron sacados rápidamente de la oficina del Jefe de los Cuervos.

Y escoltados de nuevo a la habitación, en la que habían despertado.

Dimitri: me esperrarrán aquí, hasta que venga porr ustedes... - empujando suavemente a los niños al interior -, y no le habrrían a nadie. Ok.

Y sin esperar respuesta alguna, Dimitri cerró de golpe la puerta.

Dejando solos a los dos niños, sin saber que hacer.

Kensuke: ¿ Que haremos ?... - suspirando y yendo hacia la cama con las orejitas abajo -, ¿ Y que sera de nosotros ahora ?.

Tsu: no lo se... - mirando perdidamente hacia la puerta -, solo podemos improvisar durante la marcha.

Kensuke: no creó que eso sea posible.

Tsu: tal vez... - yendo hacia Kensuke -, pero, debemos de hacer lo que sea, con tal de sobrevivir.

Kensuke: si... - desviando su mirada hacia el gran ventanal (quien no había notado hasta ahora) de la habitación -.

Tsuna al notar la tristeza en los ojos de Kensuke, salto hacia el nombrado tirándolo a la cama.
Para después abrazarlo con fuerza, y entrelazar sus colitas.

Tsu: no te preocupes, Kensuke-kun... - acurrucandose en el hombro del niño con las orejitas hacia atrás -, pase lo que pase, me asegure de que estés bien.

Kensuke: - alzando las orejitas sorprendido -, tú...

Tsu: mmm... - comenzando a cerrar los ojos -.

☯ BAJO EL CIELO, PROTECTOR ☯[Pausada]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora