Como Un Niño

666 76 35
                                    

Pasó a otra tienda para comprar algo de comida y chatarra, saliendo rápidamente de ahí también y tratando de ignorar cada comentario sobre "niño mimado". Una venita de enojo se saltaba en su frente y le daba el impulso de sacar el dedo medio y metérselo por la nariz a todas las personas que lo llamaban así.

Pero no tenía tiempo que perder, así que salió del aeropuerto tan rápido como sus dotadas piernas lo permitían, comiendo un hot-dog, teniendo un par de bolsas en su mano libre mientras corría y saltaba de techo en techo, mirando el montón de luces por todas partes y sintiéndose extrañamente feliz. Ciertamente dijo que no valía la pena preocuparse, pero era extraño como de tan sólo sentir el aire chocar contra él y ver el atractivo panorama lo hacía sentir tan... emocionado, como si fuera un niño.

Es entonces que se detiene, perdiendo la concentración en pleno salto y resbalando al momento de posar su pie sobre un tejado. Abrió los ojos abruptamente e inevitablemente soltó su hot-dog. Fue instintivo intentar enviar su Nen hacia su espalda para evitar daño, pero ya no podía hacerlo, así que rápidamente acomodó las bolsas bajo él, una de ellas con comida y la otra con su ropa vieja, cayendo así sobre éstas e impidiendo  lastimarse.

—... Idiota...

Fue lo que salió de su boca, aun en el suelo y mirando hacia el cielo. No había prestado atención a la hora en realidad, pero tal parecía que en algunas horas anochecería, y ese lugar sería más peligroso que nunca.

Utilizó sus piernas para impulsarse y levantarse sin necesidad de sus manos, mirando las bolsas en el suelo, sabiendo que todo estaba aplastado, por suerte la comida no salió de esa bolsa.

Obviamente no la iba a desperdiciar ni aunque estuviera caducada, así que de nuevo tomó las bolsas, dispuesto a salir del callejón en el que había caído.

Como un niño, ¿eh?

Se detuvo. Unas presencias desconocidas  estaban tras él y no lo había notado por descuidado. O... ¿No podían ser usuarios de Nen, cierto? ¿Personas capaces de usar zetsu?

Mierda, tenía que salir de allí.

En ese caso dio un salto lo suficientemente alto como para no ser tocado, observando ahora hacia al frente a dos personas mirándolo de forma penetrante.

Estaba acorralado.

—Vaya.. ¿Qué hace un niño a estas horas por estos lares? —Habló uno sombríamente dando pasos lentos pero que demostraban que estaba confiado con su presencia.

—Eso no te importa. —Ging pensó, no detectaba nen ahora y eso era malo, ellos podían ser usuarios nen, o podrían simplemente ser unos tipos que buscaban molestarlo.

—¿eh? ¿Qué es esa forma de hablarle a tus mayores? —Insistió el mismo hombre, dando una carcajada al finalizar.

A medida que avanzaban, Ging quedó arrinconado, pero lo bueno es que mantenían su distancia. Nunca bajó la guardia, y mantenía una mirada peligrosa en caso de que se quisieran sobrepasar con él.

—Esa mirada me gusta. — Dijo dándole codazos a su compañero—. Hey niño, pareces fuerte, y además me recuerdas mucho a alguien.

Eso le dejó pensando un poco pero no quiso seguir en eso, más aún cuando ambos hombres quedaron bajo el reflector de un poste de luz.

Uno llevaba una katana atada a su cintura y otro era rubio, muy alto e intimidante, algo que Ging no admitiría abiertamente.

—¿Qué piensas, Phinks?

—Pienso que deberíamos irnos, hemos perdido mucho tiempo aquí solo por este niño, Nobunaga.

—¿Aaah? ¿No te interesaría saber más sobre él?

TwelveOnde histórias criam vida. Descubra agora