La realidad era que se sentía sola, más sola que nunca.

Qué diferente habría sido todo si estuvieran juntos de nuevo, si pudieran hacer planes para el futuro de su hijo. Qué diferente si fuese el amor lo que los uniera y no la responsabilidadde ser padres.

El viernes por la noche, ____(tuap) decidió ir al cine en lugar de quedarse en casa esperando… nada. Pero no veía las imágenes, no oía las voces de los actores. Sólo podía pensar en Liam.

Cuando se encendieron las luces y se levantó del asiento sintió algo en su interior, como las alas de una mariposa atrapada en un tarro de cristal. Era su hijo.

El hijo de Liam.

Estaba metiendo la llave en la cerradura cuando la puerta se abrió de un tirón. En el pasillo estaba él, furioso.

—Supongo que no tengo derecho a preguntar dónde has estado las últimas —Liam miró su reloj—cinco horas.

—En el cine —contestó ___(tuap).

—¿Con quién? —insistió Liam.

—Yo podría preguntarte lo mismo cada noche, pero no voy a fingir que estoy interesada —replicó ella.

—¿Qué significa eso?

—Que sólo son las diez y media y tú has vuelto a casa toda la semana después de medianoche.

—Estaba trabajando.

—¿Ah, sí? ¿En qué, en tu nueva vida amorosa?

—¿Qué estás diciendo? ¿Cómo voy a tener una vida amorosa si ahora… si ahora tú estás aquí?

—¿Y qué clase de relación es la nuestra, Liam? Cuéntamelo otra vez, porque no me he enterado.

—Tú lo sabes muy bien.

—A ver si me acuerdo… ah, sí. Estoy embarazada y tú me has chantajeado para que viviera en tu casa. ¿Cómo podría olvidarlo?

—Estás siendo muy poco razonable.

—¿Yo estoy siendo poco razonable?

—Mira, ____(tuap), yo sólo intento hacer lo que debo…

—¿Ah, sí? Lo que deberías hacer es dejarme en paz.

Liam se cruzó de brazos.

—Muy bien. Veo que tienes ganas de pelea, así que empieza cuando quieras.

—¡No puedo creer la cara que tienes! Llevo toda la semana sola en casa y para un día que se me ocurre ir al cine tú estás a punto de llamar al FBI. Tú puedes llegar a la hora que quieras, pero si yo llego tarde tenemos una bronca. Esto me suena…

—¿Qué película has visto?

__(tuap) lo miró, perpleja.

—Pues… no me acuerdo. La verdad es que no me interesaba nada.

—Ya, claro.

—¡Que he estado en el cine!

—Sí, ya.

—Lo que pasa es que, cuando estoy estresada, no me acuerdo de los títulos.

—Te creo —dijo Liam entonces.

—Estaba distraída, no me acuerdo de la trama. Estaba pensando en otras cosas.

—¿Qué cosas?

En la cama de mi ex marido (L.P)Where stories live. Discover now