ONE SHOTS [Wattys2019]

Henry Bowers

Una Chica Única -redie_es_real-

Otro maldito día en este horrible lugar, aquí lo único que se puede hacer es ir a la escuela y seguir muriendo de aburrimiento.

Las clases habían terminado y estaba buscando a mi hermano, pero simplemente no lo encontraba, comencé a molestarme, pero por fin lo vi... Estaba siendo molestado, no me quedo otra opción más que correr a ayudarlo.

-¡Rubio, deja a mi hermano en paz!- cuando dije eso los alumnos que estaban cerca me miraron asombrados, nadie imaginaba que Ben fuera mi hermano.

-¿Quien eres tu para impedirlo?- me miró con una sonrisa.

-Es mi hermana- dijo Ben con dificultad.

-No te dije a ti- le gritó Henry.

-No vas a gritarle a mi hermano y dejalo en paz- estaba molesto.

-¿Qué vas a hacer para impedirlo?- dijo con burla.

Este chico me había cansado, así que en ese momento saqué la navaja que me dio mi abuelo y rápidamente apunté a Henry con ella y el me miró sorprendido.

-No querrás saberlo- respondí.

-Eso es increible- sonrió.

-¿Qué demonios estás diciendo?- fruncí el ceño.

-Es una navaja muy linda- soltó a mi hermano.

-Lo es- afirmé.

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Los días no pasaban rápido en este lugar, afortunadamente las vacaciones habían llegado y eso era lo único que me gustaba, estoy segura de que mi hermano tiene miles de planes con sus amigos así que estaré sola por varios días. Efectivamente mi hermano salió y decidí hacer lo mismo, caminaba al parque cuando encontré a Henry.

-Hola- se acercó a mi.

-Hola- respondí.

Desde el día que defendí a mi hermano de este tonto, este chico ha estado hablandome y algunas veces es un poco molesto, pasamos un rato hablando hasta que terminamos sentados en las esclares afuera de su casa.

-¿Quíen te dio la navaja que tienes?- preguntó.

-Me la regaló mi abuelo antes de morir, es una de las pocas cosas que  tengo de el y es muy especial para mi- sonreí al ver la navaja.

-Lindo- respondió.

Un día salí a caminar por el bosque con Henry, no sé cuanto tiempo estuvimos ahí, pero cuando regresamos ya era de noche y me di cuenta de que mi navaja se había perdido.

-Tengo que volver- dije.

-No puedes, es tarde y puede pasarte algo- me detuvo.

-Eso no importa, tengo que volver por mi navaja- insistí con ganas de llorar.

Al final Henry no me dejó volver así que tuve que ir a casa, triste por perder el único regalo de mi abuelo.

...

A la mañana siguiente alguien tocaba la puerta de mi casa, con mucha flojera abrí la puerta encontrando a Henry.

-¿Qué pasa?- pregunté.

-Tengo una sorpresa para ti- sonrió.

-¿Sorpresa?- sentí emoción.

-Si- de su bolsillo sacó una pequeña caja roja con un moño dorado.

El me dio la caja, la miré unos segundos hasta que decidí abrirla y lo que había dentro me dejó sorprendida.

-Es mi...- me interrumpió.

-Claro que es tu navaja- sonrió.

-¿Cómo la encontraste?- sonreí.

-Después de que te fuiste a casa fui a la mía por una lampara y regrese al bosque a buscarla- jugaba con sus dedos nervioso.

-Eso debío de ser muy dificil... Esto es lo más lindo que han hecho por mi, muchas gracias Henry- lo abracé.

-Se que esto lo hice sin esperar nada a cambio, pero creo que deberías salir conmigo para que todo mi esfuerzo valga la pena- sonrió.

-Tu no pierdes el tiempo, pero... Acepto- sonreí.

Guardé la navaja y comenzamos a caminar, después de caminar unos minutos Henry tomó mi mano, me quedé pensando sobre que debería de hacer en este momento y al final decidí tomar su mano tambien... Después de todo creo que las cosas serán mejores ahora.