veertien

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⋆✰⋆ ✰⋆ ✰⋆ ✰⋆ ✰⋆✰ ⋆ ✰⋆ ✰⋆   ✰⋆ ✰⋆ ✰⋆ ✰⋆ ✰⋆ ✰⋆ ⋆✰⋆Habían pasado días y ninguno le había dirigido la palabra al otro, Alessia se quedaba donde sus padre que habían manado a Hammel por sus cosas al departamento del chico pero debía volver a España

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Habían pasado días y ninguno le había dirigido la palabra al otro, Alessia se quedaba donde sus padre que habían manado a Hammel por sus cosas al departamento del chico pero debía volver a España.

Sus padres le insistieron que se quedará pero se graduaba en dos meses no podía serlo todo, como su padre había prometido le había metido tantas demandas a Erik Jenssen que ni los mejores abogados podrían salvarlo también había cortado todo lazo con las empresas de aquella familia.

—Ezequiel— susurró su esposa al ver cómo Alessia iba camino al aeropuerto— debes resolver esto.

—Alessia está mejor sin ese chico.

—Alessia ama a ese chico— le reclamo su mujer— y por cierto, tú me acuerdas a ese chico cuando tenía tu edad, recuerdas que mis padres no me querían contigo y tú formaste todo esto para demostrarles lo contrario.

—Son cosas diferentes.

—¿lo son?— preguntó la mujer.

Alessia por fin podía volver a su departamento pero lo odio, se sentía vacío.

Faltaba algo o alguien.

Y ese era frenkie pero jamás podría perdonarlo, la había abandonado cuando más lo necesitaba.

Entro a Instagram descubriendo que el chico también estaba devuelta en España, debían hablar.

No volverían, pero debían hablar.

Ambos lo sabían.

Las cosas no podían terminar así.

Así que Frenkie tomó la iniciativa llamándola al saber que la castaña estaba en su departamento apareció en este.

—Pasa— abrió la puerta la chica.

—¿cómo estás?— preguntó el.

—estoy bien ahora y ¿tu?

—estoy bien, también.

Un silencio incómodo quedó entre ellos.

—No estoy bien— dijo de la nada frenkie— lo besaste Alessia— susurró la chica.

—me beso Frenkie— corrigió.

—¡es lo mismo!— gritó este.

—¡No lo es!— respondió está igual— aparte ¿me reclamas tu a mi? !se que estabas con mikky el día que fuiste por el traje!

Él abrió los ojos.

—¿Lo sabes?

—¡Claro que lo se!— dijo esta— me mentiste, después de que la noche anterior viste como me trato tuviste el descaro de salir con ella.

—¡Solo hablábamos!— se defendió— quería pedirle que nos deja en paz y dijera la verdad a mi madre, para eso la vi Alessia.

La chica negó con la cabeza.

—eso te lo puede haber perdonado Frenkie— rió molesta— pero no te perdonaré el hecho de que te fuiste.

—¡no entiendo el gran teatro sobre eso!

Y allí explotó.

—¡El me pegaba Frenkie!— grito en su cara— Me pegó por años y años, nunca se lo dije a nadie por miedo y por eso te necesitaba. Me dejaste y ¿sabes que hizo? Trato de violarme.

Apenas y podía decir aquellas palabras, el solo pensar en esa noche le creaba un nudo en la garganta.

Frenkie la miro con un dolor gigante en su pecho.

—Alessia...

—¡Alessia nada!— grito ya con lágrimas— Una cosa te pedí, ¡una! Y no la cumpliste.

—Si tan solo hubiera sabido— trato de acercarse a la chica.

—No necesitabas saberlo para cumplir— dijo esta— el frenkie que conocí hace mese, jamás hubiera hecho eso.

Tenía ganas de decirle que su padre padre tuvo que ver pero no lo haría, no dañaría su relación otra vez.

—Yo lo siento y las palabras no me alcanzan para explicar lo molesto que me siento conmigo mismo— pasó su cabello por sus manos— si yo hubiera estado ahí esto no hubiera pasado.

—pero no estuviste...

—algún día— suspiro el chico— ¿me perdonarías?

—¿para que?— rió esta— nadie nos quiere juntos, por Dios nuestros padres no nos quieren juntos, no tenemos razones para volver Frenkie.

El muchacho negó.

—Si la tenemos, por que yo te jodidamente amo y me vale mierda todo lo demás— dijo.

El corazón de Alessia terminó de romperse.

—Yo también te amo, pero aunque te perdonara no estoy psicológicamente preparada para estar contigo otra vez— negó— cada vez que te veo sólo pienso en cómo el me tocaba.

El chico quería matar a ese carbón pues no solo eso noto la muñeca enrojecida de la chica.

Y lágrimas salieron de sus ojos involuntariamente.

Alessia estaba sufriendo y todo por su estupida culpa.

—Lo entiendo— dijo este con voz baja limpiándose las lágrimas— y otra vez ni mil palabras dan para pedirte perdón alessia, yo solo si pudiera cambiarlo todo lo haría.

—Pero no se puede frenkie— negó esta con lágrimas también— nos amamos pero nos jodimos el uno al otro.

El chico solo abandonó en apartamento subiendo a su auto en el que golpeó con fuerza el volante.

Se odiaba a sí mismo por no haber estado ahí para evitar que él la tocara.

Mientras que Alessia lloraba abrazada a sí misma.

¿Por que no podían volver a ser felices como antes?

𝐓𝐔𝐓Ú | 𝐅𝐑𝐄𝐍𝐊𝐈𝐄 𝐃𝐄 𝐉𝐎𝐍𝐆 ✔️Where stories live. Discover now