Textos calientes. // Drarry

Confesión a sí mismo.

El día de Draco se había tratado de prácticamente morir en la cama.

Se había quedado tirado sobre las cubiertas de la misma durante horas, observando el techo, pensando en todo lo que había pasado el último tiempo. Los descubrimientos recientes sobre su enamoramiento por Potter.

¿Se estaba volviendo loco?

Cómo era todo eso posible.

Si sus padres se enteraran de lo que estaba pasando, si tan sólo tuvieran una pizca de sospecha sobre sus sentimientos por el chico... Definitivamente lo matarían. Lo harían pedazos.

Entonces... ¿Por qué nada de eso le importaba? ¿Por qué no sentía culpa ni pena al pensar en ello?

-Demonios. Draco, ¿Podrías levantarte de una vez de esa maldita cama?

-Déjame en paz, Pans.

-¿Qué es lo que pasa?

-Sólo... Ya sabes.

-¿Pottermanía?

-¿Qué? ¿Potterquédemonios?

-Tu amor por el chico Potter, Draco.

-Oh. Supongo que es eso.

Un suspiro escapó de los labios de la chica, mientras que se dirigía a sentarse en el borde de la cama perteneciente al rubio, para entonces quedarse mirándolo.

-Pansy... Creo que estoy enamorado.

-¿Lo crees? ¿Estás tonto?

-¿Qué?

-Es algo TAN OBVIO, DRACO MALFOY. Has caído por tu enemigo. Te venció. HA PERTURBADO TU CUEVA. HA PROFANADO TU...

-PANSY DEMONIOS, CÁLLATE UN MOMENTO. YA ENTENDÍ.

-Creo que es hora de que le digas la verdad a tu príncipe azul.

-Lo estuve pensando... Y ya sabes, creo que lo mejor es morir.

-Estás idiota.

-No puedo simplemente aceptar que me gusta frente a él. No podría.

-¿Qué es lo peor que podría pasar?

-¡Podría escucharme!

-Debo ir a trabajar, quiero que lo pienses bien. Por favor, dime que lo pensarás.
Demonios, Draco. Jamás te había visto tan feliz cerca de alguien, jamás habías sido tú mismo hasta que comenzaste a salir con Harry. Piensa en eso, en lo mucho que te llena... Bueno, literalmente también.

-Eres una asquerosa.

-Ya me voy. Suerte, hurón.