—Voy a extrañarte mucho... Sasuke...-hablo serio.

—¿Por qué...?-las palabras no lograban salirle, estaba demasiado angustiado y el maldito nudo no le dejaba hablar como lo deseaba-...¿Por qué ahora...?

—Amigo yo...-no sabía que decir.

—Primero mis padres... y ahora tu... eres la única persona a la que le he permitido entrar en mi corazón y mas... mucho mas... compartimos un lazo de amistad muy fuerte.

—Je, je... no te olvides de la rivalidad. Siempre peleábamos por cualquier estupidez...-río ante el recuerdo-Gracias por dejarme entrar en tu corazón.

—Idiota...-sollozo.

Su amigo se acerco y lo abrazo con fuerza, acariciando su espalda.

—Piensas que esto es... es fácil... para mi...-sus lagrimas empaparon sus mejillas-...No voy a olvidarte Sasuke...

—¿Nu-nunca...?-pregunto aferrándose a la cintura de su amigo.

—Nunca...nunca te olvidare-sonrió con ternura-...Fuiste y siempre serás... mi mejor y único amigo...

—Yo... tengo algo... que decirte...-sus labios temblaban. Y el pulso se acelero rápidamente.

Se separo de su amigo y lo miro directo a los ojos.

—TE AMO...

—...—

—...—

—¡Atención... pasajeros con destino a EE.UU, favor de abordar por la puerta 12! ¡Repito! ¡Pasajeros con destino...!

—...De-debo... irme...-no salía de su perplejo estado.

Sasuke se desespero.

—¡No vas a responder!-grito alterado.

Aquellas simples palabras fueron un esfuerzo sobrehumano para él. Una carga que llevaba en su pecho por demasiado...demasiado tiempo. Y viendo la impotencia y el dolor ante la horrible posibilidad de no verlo nunca más. ¿Por qué no decirle de sus sentimientos? Se iría muy lejos... y no podría tener la oportunidad como lo tenía en esos instantes, pero...

Pero...

¡¡¡Joder... se quedaba parado sin decir una maldita palabra!!!

La expresión de su rostro era indecisa... dudosa. No lograba entender nada. Y lo que más temía se izo presente en el fondo de su corazón. La persona que tanto amaba le daba la espalda con claras intensiones de avanzar y seguir a los demás pasajeros.

Pero el azabache le detuvo. Lo abrazo con fuerza de la cintura, y su rostro cayó en su espalda ocultando las incesantes lágrimas que surgieron ante su mayor miedo. El miedo que imagino tener en el momento de su confesión.

—¡Olvídalo!-sollozo de dolor-¡Olvida lo que dije... por favor...!

El cuerpo contrario se estremeció.

—Te doy asco... ¿Verdad?... por sentir algo tan... tan anormal. Prefiero mil veces tu amistad... tu compañía... a perderte de esta manera. Olvídalo... snif... por favor... sigamos como antes. Amigos... amigos... siempre.

Aquel individuo deshizo el cálido contacto al momento de terminar su palabrería. Se volteo demostrando una mirada de firmeza y tomo de los hombros a un muy sorprendido Sasuke, jamás espero su acción.

Mi regalo especialWhere stories live. Discover now